El pasado día 17 de septiembre, un numeroso grupo de personas tuvimos la suerte de poder participar en un taller de monitores de educación afectivo sexual para jóvenes, organizado por el Centro de Orientación Familiar de Jaén. Dicho taller, que tuvo lugar en el Seminario Diocesano en jornada de mañana y tarde, e impartido por dos psicólogas de Madrid especialistas en el tema, fue una gran oportunidad que propició la “reflexión sobre el amor humano y el desarrollo afectivo sexual de los jóvenes en sus diferentes dimensiones y conocer herramientas útiles para el trabajo con adolescentes y jóvenes”.
Los asistentes tomamos conciencia de la importancia de la educación afectivo sexual, nos dejamos seducir un poco más por el maravilloso mundo de las emociones, nos entusiasmamos con todo lo que todavía nos queda por descubrir y nos alegramos por lo mucho que podemos transmitir, gracias a esta jornada de formación.
A este Taller de Sexualidad y Afectividad acudió una buena representación de los acompañantes Kairós de nuestra Diócesis de Jaén. Grupos de Villargordo, Torredelcampo, Alcalá, Mengíbar, Peal de Becerro, así como de la misma capital: de la parroquia de Nuestra Señora de Belén y San Roque, San Pedro Poveda, El Salvador, San Ildefonso, San Félix, San Bartolomé, San Juan de la Cruz, La Santa Cruz… participaron y pudieron aligerar muchas de las dudas y preocupaciones con las que habían entrado. El tema de la sexualidad y afectividad siempre se ha visto como algo “tabú” para hablar con los adolescentes, sin embargo y, aunque ellos no lo sepan, es un tema que debe ser tratado dada la importancia que tiene en nuestra sociedad, en sus vidas. Donde no “todo vale” y no “todo está bien”.
El hecho de estar con un grupo de adolescentes Kairós implica preocuparse por ellos, por su familia, intentar ayudarles a que se conozcan a sí mismos, cómo es su cuerpo, cuáles son los cambios que se producen que les hacen ser como son. Este taller facilitó a los acompañantes de nuestra Diócesis un conocimiento inicial sobre el tema y algunas dinámicas para intentar llevarlas a la práctica con nuestros adolescentes en un día de convivencia.
Fue una jornada intensa y muy recomendable para todas aquellas personas que, aun conociendo el tema, se adentren en esta propuesta de amor que tiene Dios para con nosotros.
Miguel Lechuga Viedma
María Alejo Armijo