El pasado 21 de Febrero quedará en la memoria de cuantos han participado en la celebración que el Arciprestazgo de Andújar ha realizado en el Santuario de Ntra. Sra. de la Cabeza.
Desde que se supo que el Santuario iba a ser uno de los lugares para lucrarse de las gracias por este hecho extraordinario, se comenzó a planificar los actos que se irían realizando a lo largo del año. Especialmente la peregrinación al Santuario.
Sobre la 10 de la mañana llegaban los autobuses a la explanada del Arco de la plaza, dejaban a sus pasajeros para que se acercaran al lugar del inicio de la celebración.
Se acercaban por los diferentes lugares que dan acceso al lugar de inicio de la celebración.
A las 10,30 horas, se iniciaba la procesión de celebrantes, (casa de Cofradías de Villanueva de la Reina), presidida por el Sr. Obispo de la Diócesis de Jaén, acompañado por todos los sacerdotes del Arciprestazgo de Andújar, así como el Delegado de Liturgia, D. Antonio Lara, y el diacono permanente, Andrés Borrego Toledano.
Al comienzo del Arco, se entonó, el Himno de la Misericordia, por las religiosas Esclavas Carmelitas de la Sagrada Familia, respondiendo la Asamblea.
El Señor Obispo invitó a la alabanza. Proclamó el Santo Evangelio el diácono.
El Arcipreste leyó un texto tomado de la Bula «Misericordiae Vultus». A su término, se comenzó a subir la calzada leyendo las Letanías de los Santos.
Llegados a la Puerta de la Misericordia, el Obispo nos situó haciéndonos reflexionar. Entramos en la Basílica cantando ¡Que alegría cuando me dijeron!
Se fueron sucediendo los hechos, según estaban programados y participados por componentes de los fieles de cada parroquia, dando a la celebración un recogimiento, silencio, y una viveza que llamaba la atención por el interés que todos seguíamos la celebración.
La Eucaristía muy participada y participativa. Recitando la asamblea, el Credo apostólico, y la Oración del Papa Francisco para el Año de la Misericordia.
La Salutación a la Santísima Virgen de la Cabeza, con el canto: Salve Regina.
Se terminaba el acto después de recibir la Bendición Solemne del Señor Obispo, cantamos «Morenita y Pequeñita».