Cristóbal Lupiáñez subraya que, a causa de la pandemia, se han incrementado las demandas de ayuda, mientras que los recursos para atenderlas se ven cada vez más mermados.
Cáritas Interparroquial de Linares está llevando a cabo una campaña para sumar socios a su proyecto caritativo y social. Su coordinador, Cristóbal Lupiáñez, ha explicado que esta iniciativa surge ante la compleja situación para muchas familias derivada de la pandemia. “Estamos atravesando uno tiempos muy duros. Muchas familias se han quedado sin trabajo y con ello se han visto abocadas a la pobreza”, ha lamentado. “Las demandas de ayuda están creciendo en Linares y nuestros recursos para atenderlas se ven cada vez más mermados, por lo que animamos a sumarse a toda persona sensible a esta realidad que sufren muchos linarenses. Solo con la solidaridad y el compromiso de todos podremos paliar sus carencias”, ha añadido el coordinador linarense.
Desde Cáritas Interparroquial de Linares se ha buzoneado un boletín de inscripción por toda la ciudad, que, una vez cumplimentado, puede enviarse o entregarse en su sede, ubicada en la Avenida María Auxiliadora, en el edificio de la estación de autobuses; en el Comedor Social San Agustín, junto a la parroquia de igual nombre, o en el apartado de correos número 200 de Linares.
Junto con el formulario de inscripción, Cáritas Linares ha difundido algunos de los datos de su acción caritativa y social en esta ciudad. En concreto, en el apartado de Atención Primaria, se da cobertura a las Cáritas parroquiales de las necesidades básicas, como alimentación, luz, alquiler, agua y reparación de viviendas, entre otras. Según los últimos datos hechos públicos, se ha atendido a más de 800 familias. Por su parte, desde el Comedor Social San Agustín, en la actualidad se atiende a unas 25 familias y a una treintena de transeúntes y personas sin hogar. “En total, unas 130 personas se benefician a diario de este servicio de Cáritas Interparroquial de Linares”, concreta Lupiáñez.
Entre otras acciones, el coordinador de Cáritas Interparroquial de Linares ha señalado las dirigidas a los niños de familias en riesgo o en situación de exclusión social, el acompañamiento a personas privadas de libertad y a sus familias y la ayuda a personas drogodependientes, facilitándoles el ingreso en un centro para su desintoxicación y, en el caso de precisarlo, sufragando Cáritas parte de los gastos. De nuevo, a partir de este mes de enero, también se retomará la recogida de muebles y electrodomésticos en buen estado para ponerlos a disposición de las familias que no pueden hacer frente a su compra.
Cáritas diocesana de Jaén