La calle San Pablo de Baeza, una de las más “semanasanteras” de la ciudad por la que pasan todas y cada una de las Cofradías y Hermandades, fue testigo, en la mañana de ayer, de la inauguración de la escultura-monumento a la Semana Santa de Baeza, declarada de Interés Turístico Nacional. En el acto estuvieron presentes ; el Obispo de la Diócesis de Jaén, Monseñor Sebastián Chico Martínez; la alcaldesa de Baeza, Lola Marín; el presidente de la Diputación Provincial de Jaén la presidenta de la Agrupación Arciprestal de Cofradías de Baeza, Ana Montoro; el escultor del monumento, José Javier Ángeles Alejo; así como miembros de la Corporación Municipal, representantes de las Cofradías y Hermandades de la ciudad, la Banda de Música de Baeza y miembros de la sociedad civil y cultural de Baeza.
Durante el acto de descubrimiento de la escultura, -que fue bendecida por el Obispo de la Diócesis de Jaén, Monseñor Sebastián Chico Martínez- la máxima representante municipal destacó que la ciudad de Baeza tenía “un anhelo” con su Semana de Pasión y era la de “regalarle monumento que represente las peculiaridades y riqueza de la Semana Santa baezana”.
En este sentido, Marín expresó que “por fin ve la luz” este trabajo en el que “llevamos meses de dedicación en coordinación entre el Ayuntamiento y la Agrupación de Cofradías”, para conseguir el reto que “nos propusimos”, que es el de “que todas las personas cofrades de Baeza se sintieran representadas en este monumento a nuestra Semana Santa”.
La alcaldesa de la ciudad, Lola Marín, destacó que “hoy se ve cumplido este sueño de la ciudad de Baeza que nos hará recordar, cada día, nuestra historia, costumbres y tradiciones. Esa que pasa de padres y madres a hijos, porque ese es el valor de nuestra Semana Santa. Un legado cultural lleno de pasión y amor por ella, que pasa de generación en generación”. Así, esta escultura, que ha sido sufragada por la Diputación Provincial de Jaén, representa a todas las Cofradías y Hermandades de la ciudad, a todas las personas cofrades de Baeza y a su Semana Santa, ocupa ya un lugar privilegiado en la ciudad.
Con todo, Lola Marín atestiguaba que “esta escultura es la suma de muchísimos esfuerzos, no solo de los que estamos hoy, que somos meros custodios de la ciudad de Baeza en un tiempo finito, si no de todas las personas que han trabajado en el pasado por nuestra Semana Santa y por las que lo harán en el futuro”.
“Este conjunto escultórico desprende familia y sentimiento cofrade, en el que todas las personas se pueden sentir representadas, pues es una escena que cualquier familia baezana vive cada Semana de Pasión”, recordaba la alcaldesa de la ciudad, Lola Marín, quien tenía palabras de agradecimiento para todas las personas que han presidido la Agrupación Arciprestal de Cofradías de Baeza a lo largo de su historia y para los alcaldes que la precedieron. “Este es el resultado de una ciudad cofrade, que hoy pone en la calle un sentimiento que llevamos en el pecho durante todo el año”, concluía Marín.
Monumento a la Semana Santa
La escultura-monumento está inspirada en una escena familiar y cotidiana durante la Semana Santa baezana. Está compuesta por un padre, una madre y una hija que se preparan para salir a procesionar.
En la escena se muestra a la madre ofreciendo a la niña la partitura del Miserere, siendo este un símbolo que se transmite de generación en generación. El padre sostiene un capirote con su brazo izquierdo. Todos ellos, llevan la cara al descubierto, con la intención de humanizar la Semana Santa poniendo rostro a las personas que participan en ella, dando así, un toque de singularidad a la obra.
Las tres figuras están conectadas mediante gestualidad. Una singularidad es que la figura paterna lleva en el pecho la medalla de la Agrupación de Cofradías y la materna porta la medalla de la Virgen del Alcázar. Una Cruz de guía exenta aparece apoyada en una pequeña columnata siendo uno de os elementos más visibles de la composición.
El conjunto escultórico se culmina con una placa conmemorativa en la que aparecen todas las cofradías de Baeza, reforzando de esta manera la unión entre las mismas y retratando sus símbolos para la posteridad.
Material del conjunto escultórico
El material para este conjunto escultórico es el bronce, dándole una categoría monumental que haga sumar al patrimonio de la ciudad de Baeza.
La obra, tiene una pátina verde, propia del bronce antiguo de las esculturas figurativas, a excepción de la Cruz guía cuyo material es el acero corten, característico de las cruces guías de Baeza.
Fuente: Ayuntamiento de Baeza