La noble y mariana ciudad de Baeza volvió a rendir culto, un año más, a su Excelsa Patrona, la Virgen del Alcázar con motivo de los diferentes cultos y actos que se organizaron desde la Real Archicofradía de Santa María del Alcázar y San Andrés Apóstol en un nuevo mes de Agosto, donde los baezanos, demostraron una vez más el profundo amor y devoción que sienten por su Patrona.
Comenzaron estos cultos en la noche del 5 de Agosto con la Vigilia General que la Adoración Nocturna dedica a la Virgen del Alcázar por ser la misma la Patrona de la sección adoradora de Baeza, en la misma participaron los 3 turnos de A.N.E. y el turno de A.N.F.E. siendo presidida esta cita eucarística por el Rvdo. Sr. D. Domingo Antonio Pérez Fernández, Párroco de San Andrés y Capellán de la Cofradía.
Desde el 6 al 14 de Agosto tenía lugar la novena en honor a la Virgen del Alcázar en la Parroquia de San Andrés, donde comenzaban los cultos a las 20 Horas con el rezo del Santo Rosario, confesiones y el ejercicio de la Novena, para continuar con la celebración del Santo Sacrificio de la Misa, el cual fue oficiado por el Rvdo. Padre Fray Alejandro Soriano Martínez OCD del Convento de los carmelitas descalzos de San Fernando (Cádiz). Cada día de novena fue dedicado a un grupo de la Iglesia de Baeza, en este año, la Novena estuvo dedicada cada día a: familias y niños, cuerpo de caballeros horquilleros de la Virgen del Alcázar, jóvenes y adolescentes, Agrupación Arciprestal de Cofradías y Hermandades, Renovación Carísmatica, Cáritas Interparroquial, Parroquia del Cristo de la Yedra, catequistas, profesores, maestros y formadores, para culminar en la víspera del día de la Virgen con el día dedicado a los baezanos ausentes. También y como es tradición, durante los días de novena los diferentes coros de la ciudad y comarca de la loma colaboraron con sus cantos, los cuales sirvieron para ayudar a los presentes a rezar.
Como novedad en este año, durante todos los días de Novena tuvo lugar el rezo del Ángelus ante las plantas de la Madre de los baezanos, al término del mismo no cesaron las visitas al camarín como tampoco a lo largo de estos días cesaron las visitas a la Parroquia de San Andrés para visitar a la más bella flor de Baeza.
En la mañana del 14 de Agosto, la hermosa entre las hermosas aguardaba a las puertas del templo a todos los caballistas de la comarca de Baeza en la ya tradicional ofrenda floral a la Reina de Baeza, la cual, mostraba su belleza con la luz del día mientras que los caballistas depositaban sus flores antes sus plantas y como no, también sus oraciones, plegarias y vivas.
Y por fin llego un nuevo 15 de Agosto, día grande para los baezanos, los cuales quisieron aprovechar este día desde los primeros instantes y así, nada más pasar la media noche, la Iglesia de San Andrés se volvía a llenar de fieles para saludar y piropear a la Virgen del Alcázar. Los coros, solistas y rondallas de la ciudad cantaron y rondaron a la Gloria de Baeza, viviéndose así momentos de verdadera emoción dentro del templo.
A las 12 horas tenía lugar la Solemne Fiesta Mayor concelebrada en honor a la Virgen del Alcázar, la cual fue presidida por el predicador de la novena y a la cual asistieron las representaciones ciudadanas de Baeza, sin duda alguna una nueva muestra de amor de Baeza a su Virgen. A las 20 Horas se volvió a celebrar el Santo Sacrificio de la Misa, siendo presidido por el Rvdo. Sr. D. Sebastián Moreno, Párroco de Beas de Segura.
Entre aromas de gloria, perfumes de belleza y el efusivo repicar de la beltrana, la Reina de Baeza se volvió a encontrar con sus hijos los cuales quedaban prendados ante el señorial paso de la Señora, la cual lucia radiante en la noche del 15 de Agosto. Abría el cortejo la banda de cornetas y tambores Nuestra Señora de las Penas de Úbeda, tras ella los niños de comunión, centenares de fieles y devotos, representaciones ciudadanas, movimientos religiosos, cofradías y hermandades y mantillas los cuales formaban un gran cortejo dignísimo para la Reina enjoyada con oro de ofir, tras ella el clero de la ciudad, los consejos locales de la adoración nocturna, el cuerpo de horquilleros, la comisión permanente de la Agrupación Arciprestal de Cofradías y Hermandades de Baeza, representaciones judiciales y militares, la corporación municipal del Excmo. Ayuntamiento de Baeza y la banda de música de Baeza.
Cientos de baezanos aguardaban el paso de la Virgen del Alcázar por unas engalanadas calles en las cuales se escuchaban constantemente cantos, plegarias y vivas a la mejor de las nacidas, de fondo, el repicar de los diferentes Conventos, que desde la lejanía se sumaban en forma de oración a esta gran fiesta mariana.
La presencia de la lluvia en el centro de la ciudad hizo que la Virgen se encerrara antes de lo previsto, llegando a su casa de San Andrés entre aplausos y gritos de: ¡Alcázar pronto coronada! Y es que es el deseo de los baezanos desde hace décadas, el poder ver coronada a la Virgen del Alcázar, deseo que esperemos que pronto pueda ser una realidad.
José García Checa
Colaborador
