El Colegio Filipense de Baeza, celebraba la fiesta de su patrón, San Felipe Neri en este año en el que se cumplen 400 años de su canonización.
La Santa Misa, estuvo presidida por nuestro Obispo, Don Sebastián Chico Martínez, en la Santa Iglesia Catedral de nuestra localidad y concelebrada por su Secretario, D. Francisco Javier Cova; D. Juan Quiles, párroco del Salvador; D. Domingo Pérez, párroco de San Andrés; y D. Abel Rosa, capellán Castrense de la Academia de la Guardia Civil.
Alumnado, profesorado, Religiosas Filipenses Misioneras de Enseñanza (titulares del colegio), personal de administración y servicios, familias, antiguos alumnos y colaboradores, participamos de la celebración de la Santa Misa con un precioso tono alegre y festivo en la que el Obispo nos alentó de manera singular a vivir según el ejemplo de San Felipe Neri con cuatro claves fundamentales:
- Acoger la fe como don de Dios.
- Vivir la fe, con el deseo de ser hijos de Dios, respondiendo a su voluntad y con el anhelo de poder ser santos.
- Celebrar la fe, especialmente por medio de los Sacramentos.
- Testimoniar la fe: hablar del Señor con nuestro modo de vivir y llegada la ocasión, también con la palabra.
Damos las gracias a Dios por lo vivido y también nos sentimos profundamente agradecidos a Don Sebastián, nuestro Obispo, por el cariñoso, cercano y sencillo lenguaje con el que se dirigió a los presentes, que con tanto fervor nos dimos cita en la mañana del 26 de mayo ante San Felipe Neri, ante la Madre de Jesús, Mª Inmaculada y el mismo Jesús presente en la Sagrada Eucaristía.
A continuación, como venía siendo habitual y pasados los fatídicos años 2020 y 2021 por lo que ha supuesto la pandemia sufrida, tuvimos nuestra alegre procesión por las calles del barrio, portando la imagen de San Felipe nuestros mayores, los alumnos de sexto de primaria y la imagen de la Virgen Inmaculada los alumnos de tercero de Infantil, unos como otros, también muy cariñosamente, cedieron un lugar bajo sus andas a aquellos alumnos a los que les hubiera correspondido los dos cursos anteriores.
Tambores, mantillas blancas, incienso y campanillas, acompañaron el cortejo, que en esta ocasión nos llevó al convento de las Madres Clarisas Franciscanas de Santa Catalina en solemne visita, donde se encontraba Nuestra Madre y Señora la Virgen del Alcázar, con motivo de la Misión: “María se puso en Camino”, por el 125 Aniversario de la fundación de su Real Archicofradía; a la que llevamos nuestro cariño, oración y ofrenda.
Comunidad Educativa del Colegio Filipense de Baeza
