El que fuera párroco de la localidad en 1966, Domingo Fernández, fundó esta escuela de San Juan Bautista, siendo Obispo de Huelva el venerable José María García Lahiguera
Nuestro obispo, José Vilaplana, descubrió ayer en la fachada de la actual residencia de mayores de San Juan del Puerto un azulejo que recuerda los cincuenta años de la Escuela Parroquial San Juan Bautista de la localidad.
Durante su intervención, señaló la emoción que le producía el hecho providencial de que hubiera sido, hace cincuenta años, su antecesor en la sede onubense, el Venerable siervo de Dios José María García Lahiguera, quien hubiera bendecido la Escuela Parroquial, y que él -que había conocido al siervo de Dios, que le había conferido las órdenes sagradas, que le había nombrado rector del seminario menor de Valencia, que fue su arzobispo, que lo trató incluso días antes de morir, que confió en él- fuera ahora el que hubiera venido a San Juan del Puerto a dar gracias a Dios por la escuela fundada por D. Domingo.
Además, recordó que él había ido a una “pequeña y sencilla escuela de un pueblo de la montaña de Alicante”, -como lo había sido la Escuela Parroquial-, y que después fue al seminario, donde “me costó adaptarme al nivel cultural de mis compañeros, pero hubo gente que me ayudó”, por lo que animó a todos los miembros de la comunidad educativa a seguir adelante con esta importante labor.
Por su parte, el párroco de la localidad, Victoriano Solís, quiso subrayar el recuerdo agradecido “al hombre, al sacerdote, que, siguiendo su vocación de servicio, fundó una Escuela para los sanjuaneros, en un momento en que la oferta educativa estaba bajo mínimos en una población que crecía en el entorno del Polo de Desarrollo. No podemos dejar de ver en ello una intuición que el Espíritu Santo puso en el corazón del sacerdote que entonces os servía como Pastor”.
El director del centro, Miguel Pérez, también resaltó la figura del entonces párroco de San Juan del Puerto, Domingo Fernández, gracias a quien “tantas personas recibieron su ayuda para encontrar un trabajo o en sus dificultades económicas. Los jóvenes con el Club Junior, con la Rondalla San Juan Bautista, con la Banda de Tambores y Cornetas Nuestra Señora del Carmen, conocieron también su servicio y apoyo”.
La Coral de la Sagrada Cena, una vez descubierto el azulejo, ofreció un canto de acción de gracias. Numerosas personas asistieron a este histórico y emotivo acto al que había antecedido la celebración eucarística ofrecida por la parroquia y la hermandad sacramental de San Juan Bautista con motivo de la fiesta del Martirio del Santo Patrón.