La celebración, que coincide con la Solemnidad de la Sagrada Familia, tendrá lugar en la Catedral el 27 de diciembre, a las 12 horas.
El próximo domingo, día 27 de diciembre, a las 12.00 horas, la Diócesis de Huelva celebrará en la Santa Iglesia Catedral el XXV aniversario de la Consagración Episcopal de Mons. José Vilaplana, una efemérides que coincide con la Solemnidad de la Sagrada Familia.
Durante los últimos 25 años, desde que en 1984 fue nombrado obispo auxiliar de Valencia, Mons. José Vilaplana ha podido conocer de cerca la realidad de diferentes diócesis españolas, pero también ha viajado a las zonas más empobrecidas de países latinoamericanos y africanos, con los que se ha solidarizado a través de numerosos gestos. Uno de los más recientes es el de la pasada Cuaresma, en la que nuestra Diócesis onubense recaudó una importante ayuda económica que se destinó al Chad, país africano.
En este aniversario, nuestro obispo recuerda también con gran cariño, a través de este comunicado, su ordenación sacerdotal, el 25 de mayo de 1972, y destaca la labor del párroco. En este sentido, expresa que “como obispo, estoy dedicado a todos pero, como son muchas personas y no las puedo acompañar en su crecimiento personal ordinario, esto me hace añorar mi misión como párroco”.
Así, hace referencia a unas palabras de Juan XXIII, en una anécdota de una película que sobre su vida se filmó, cuando le preguntan de niño a qué se quiere dedicar en el futuro y responde “yo sólo quiero ser un pobre cura de pueblo”, palabras con las que nuestro obispo se siente muy identificado porque “quiero ser obispo como un sencillo cura de pueblo”, subraya.
No se olvida tampoco estos días de la situación de crisis por la que atraviesan muchas familias actualmente, un problema que día a día intenta paliar Cáritas Diocesana, entre otras organizaciones. Al respecto, nuestro Pastor resalta la colaboración y la generosidad de todos, así como a la “importante corriente de presencia de la Iglesia cercana al mundo de los pobres”. De todas formas, añade, en relación a las situaciones de pobreza, que “nunca nos podremos dar por satisfechos mientras haya una persona que esté pasando hambre, que no viva en unas condiciones de vivienda digna o que esté sola en la calle, porque la Iglesia tiene que sentirse como madre, llamada a estar a su lado”.
Además, en el marco del Año Sacerdotal, proclamado por Benedicto XVI con motivo de los 150 años de la muerte del cura de Ars, Mons. José Vilaplana, envía un mensaje a los sacerdotes para que “nos parezcamos más a Jesucristo y realmente vean en nosotros las actitudes del Buen Pastor, porque estamos llamados a reunir a la comunidad, por tanto, a ser servidores de la comunión y a dar acogida y servicio a los que más lo necesiten”.
Entre sus principales preocupaciones está la juventud porque “vive momentos de muchas posibilidades, pero es también un colectivo muy vulnerable, por lo que sería necesario un debate más sereno en el que estuviera implicada toda la sociedad, para crear así una educación más integral y más humana”. Por ello, cree necesario un gran pacto de Estado sobre Educación.
D. José Vilaplana nació en Benimarfull, provincia de Alicante y archidiócesis de Valencia, el 5 de diciembre de 1944. Cursó estudios eclesiásticos en el seminario metropolitano de Valencia y recibió la ordenación sacerdotal el 25 de mayo de 1972. Durante el curso 1980-1981 realizó estudios de Teología Espiritual en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.
Tras su ordenación sacerdotal desarrolló su ministerio, de 1972 a 1974, como coadjutor en la parroquia Cristo Rey de Gandía (Valencia). Desde ese año y hasta 1980 fue Rector del Seminario menor de Játiva y profesor de religión en el Instituto de BUP de la misma población. Fue Vicario Episcopal de la zona de Alcoy-Onteniente y párroco de Penáguilla, Benifallim y Alcolecha entre 1981 y 1984. En 1984 fue párroco de San Mauro y San Francisco en Alcoy (Alicante), hasta que fue nombrado obispo auxiliar de Valencia, para recibir la consagración episcopal el 27 de diciembre de ese mismo año. El 23 de agosto de 1991 fue trasladado a la sede episcopal de Santander.
Con fecha 17 de julio de 2006, fue nombrado por S.S. el Papa, Benedicto XVI, Obispo de Huelva, sede de la que toma posesión el día 23 de septiembre de 2006. En la Conferencia Episcopal Española es el Presidente de la Comisión Episcopal del Clero.
Los vicarios de la Diócesis de Huelva han pedido a los fieles que tengan presente a nuestro Pastor en sus oraciones.
