
“Ha sido, sobre todo, un pregón sacerdotal; ha hablado un sacerdote, una vida de servicio muy entregada, 39 años de entrega, sirviendo a muchas comunidades y muy de la mano de las hermandades y cofradías”, con estas palabras definió el obispo de Guadix el pregón de la Semana Santa accitana, que pronunció el sacerdote Manuel Millán, el sábado 15 de marzo, en el teatro Mira de Amescua.
Era el Pregón de la Federación de Hermandades y Cofradías de Guadix y, además del obispo, estaban el alcalde accitano, Jesús Lorente; el presidente de la Federación de Hermandades y Cofradías, Manuel Díaz; el consiliario de Hermandades, Manuel Amezcua; el delegado territorial de Economía, Hacienda, Fondos Europeos y de Industria, Energía y Minas en Granada, Gumersindo Fernández; el diputado de Emergencias y Asistencia a los Municipios, Eduardo Martos; miembros de la Corporación Municipal y representantes de las hermandades y cofradías de Guadix, Baza y Huéscar. También había feligreses las parroquias por las que ha pasado el pregonero en sus 39 años de ministerio sacerdotal: Fonelas, Gor, Jérez del Marquesado, Lanteira, Baza… y Guadix.
- Francisco Jesús Orozco, al final del pregón, alabó al pregonero por el relato que había hecho, anunciando la Semana Santa accitana al tiempo que hablaba de su sentido más auténtico: “ha hablado -dijo- de la verdad de las hermandades y cofradías, porque sin Cristo, Dios hecho hombre, hoy presente en nuestro corazón, en nuestra vida y también en la Iglesia, y en las hermandades y cofradías, sin su Muerte y su Resurrección, como el pregonero nos ha dicho, nada tendría sentido… ha sido un pregón que ha anunciado la verdad de nuestra Cuaresma y de nuestra Semana Santa”.
Comenzó su pregón Manuel Millán hablando de sus años de sacerdote y de la vinculación que ha tenido en sus años de sacerdocio con las hermandades. También con las hermandades de Semana Santa de la ciudad de Guadix, pues ha sido consiliario de la Federación de Hermandades de la ciudad accitana. Además, recordó cómo ha tenido que tramitar muchos documentos a las hermandades por su cargo como secretario canciller del Obispado.
Pero, sobre todo, invitó a recorrer “la Jerusalén de Guadix”, como dijo, o la Semana Santa accitana recordando los pasajes de la Pasión del Señor en los que se inspiran las distintas hermandades de la ciudad, que procesionan a lo largo de toda la semana de Pasión. Y todo, añadiendo una nota pastoral, que dejaba ver claramente su condición de sacerdote que quiere animar, pero también orientar, a las hermandades.
Quiso Manuel Millán que, sobre el escenario, estuviesen símbolos que le identifican: una casulla, por su condición de sacerdote; una cruz, por la referencia a la Pasión; un cirio pascual, que evocaba la resurrección del Señor; y un estandarte con las imágenes de las Santas Alodía y Nunilón, Patronas de Huéscar, su pueblo natal.
El acto terminó con la Agrupación Musical Cristo del Perdón, que interpretó varias marchas procesionales.
Antonio Gómez
Delegado diocesano de MCS. Guadix