
El coronavirus ha podido, por segundo año consecutivo, con el programa de culto que cada año la hermandad prepara en torno a la Santísima Virgen de la Cabeza y al Cristo de los Milagros, de Huéscar. Son unas celebraciones que culminaros en 15 de agosto.
Se han suprimido la procesión del día 14 al finalizar la novena y la romería del día 15 , donde, una vez que termina la Eucaristía de despedida, que tiene lugar a las 7 de la mañana en la parroquia, la Virgen de la Cabeza, junto con el Cristo de los Milagros, sale en procesión hasta su ermita, al pie de la sierra de Marmolanze.
La pandemia sin embargo no ha restado brillantez y devoción a los actos religiosos en torno a la Santísima Virgen de la Cabeza.
La primera quincena del mes de agosto son días en los que, en casi todas las parroquias de la diócesis de Guadix, se venera y rinde culto a la Santísima Virgen María. Son los días de la “Virgen deaAgosto”, como se le llama popularmente a las fiestas que se tienen en torno a la Asunción de la Virgen María a los cielos, celebrada el día 15 del presente mes. Es la de Guadix una diócesis con amplia tradición en este sentido y que habla de la devoción que sus gentes le tienen a la Virgen María.
Las celebraciones en torno a la Virgen de la Cabeza comenzaron con el tradicional novenario, que tuvo lugar del 6 al 14 de agosto. Cada día se ah rezado primero el Rosario y después se ha celebrado la Eucaristía y el ejercicio de la novena. Todo ante la imagen de la Virgen de la Cabeza que, desde el 5 de agosto, ya estaba engalanada en el manifestador de la parroquia. El último día de la novena, el día 14, la hermandad estuvo acompañada por el alcalde de Huéscar y una representación de la corporación municipal, junto con una representación de todas las cofradías que hay en parroquia
La hermandad no ha querido hacer un gran llamamiento a los devotos en estas circunstancias de pandemia, que, en años anteriores, acudían en gran número, sobre todo a la romería del día 15. Pero sí lo han tenido todo a punto, para que todos aquellos devotos que han querido acudir a la ermita, hayan podido ver más de cerca la carita tan guapa de esta imagen, con el pequeño niño en sus brazos.
Finalmente, en la ermita, a las 12 de la mañana, el párroco José Antonio Martínez, presidió la Santa Misa, acompañado de los hermanos y de los fieles y devotos que pudieron entrar hasta completar el aforo permitido. Allí se pidió para que el próximo año hayamos vuelto a la total normalidad, y nadie se quede sin ver esta imagen por las calles de Huéscar, pues la Virgen de la Cabeza sigue siendo amparo y defensa de estas tierras del norte de la diócesis de Guadix.
José Antonio Martínez
Párroco de Santa María de Huéscar.