El miércoles 21 de junio se hace público el premio de la Concordia de los Premios Princesa de Asturias de 2017. Creo que es el último que queda por conceder y la diócesis de Guadix, bueno, Patricio Larrosa, misionero de la diócesis accitana, es uno de los candidatos al premio. Seguro que hay muchos candidatos. Uno de ellos parece que es el exsecretario general de la ONU, Ban Ki-moon. Al menos, eso dicen los rumores.
¿Quién le iba a decir a Patricio Larrosa, cuando salió de Huéneja, que acabaría midiéndose nada menos que con las Naciones Unidas? Los mismos rumores, dicen que el duelo está entre el ex de las naciones Unidas y Patricio Larrosa y su labor en Honduras. Pues, aunque todas las naciones unidas puedan con Patricio Larrosa, lo cierto es que estar ahí, entre los finalistas, ya es un gran reconocimiento a su labor, a la misión que ha montado en Tegucigalpa y, sobre todo, a los miles de niños y niñas –con sus respectivas familias- que se ven beneficiados de la labor emprendida por Patricio.
Espero que el den ese premio a Patricio Larrosa y a la Ong –acoes.org- que hay detrás, sirviendo de apoyo y haciendo posible esa misión. Si, al final, se lo dan a Ban Ki-moon se lo estarán dado a un ex y sonará a “cumplido “político. Si se lo dan a Patricio, como espero y deseo, se lo estarán dando a una labor por la que casi 10.000 niños reciben cada día educación y, en muchas ocasiones, comida: una labor de futuro, porque la labor misionera de Patricio continuará el año que viene y muchos más. Y una labor que crea concordia porque detrás de patricio hay cientos de familias de toda España y de otros países que le apoyan y le ayudan.
Patricio Larrosa salió un día para Honduras como misionero de la diócesis de Guadix, hace ya 25 años. Iba para unos pocos años, pero quedó atrapado por aquella gente a la que les ha dedicado la mitad de su vida. Quizá iba para 4 o 5 años, que se han convertido en 25 y solo Dios sabe cuántos más serán. Su labor allí es importante, ofreciendo escuelas, comida, sanidad y posibilidades de futuro a muchas familias, con sus niños y sus jóvenes. Casi 10.000 niños asisten a diario a los colegios que ha creado Patricio en las afueras de Tegucigalpa, en un barrio dejado por muchos, pero en el que Patricio ha encontrado una gran familia. También hay comedores, templos, consultorios médicos…
En el “duelo” Patricio vs Naciones Unidas, espero que gane Patricio, espero que gane la solidaridad y la concordia. El miércoles 21 lo veremos.
