El pasado 11 de agosto, las comunidad de Franciscanas Clarisas, la Tercera Orden Franciscana de Guadix y un número considerable de fieles, celebraron la festividad solemnemente de Santa Clara de Asís, en la Parroquia de Santiago de Guadix. La Eucaristía, que fue presidida por el párroco Andrés Galiano, fue concelebrada por varios sacerdotes, entre ellos el Padre Pedro Mena, carmelita descalzo encargado de celebrar el Triduo preparatorio.
El Padre Pedro Mena, en la homilía, destacó el esfuerzo que debe hacer cada cristiano para ser espejo de Cristo, de su amor y de su misericordia, como lo fueron Santa Clara y San Francisco. También llamó a vivir la alegría franciscana.
El padre Mena vino a a decir que no podemos vivir -seamos obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas- una vida de fe «avinagrada» y apartados del encuentro con Cristo, quien realmente puede transformar nuestra vidas.
Manuel López Gómez O.F.S.
