
La nueva comunidad de religiosas, formada por tres hermanas, va a atender la Casa Sacerdotal “San Juan de Ávila” de Guadix, que, con su llegada, queda abierta para atender a los sacerdotes jubilados
El domingo 5 de septiembre se ha bendecido y abierto la casa donde vivirá la nueva comunidad de religiosas que ha llegado a la diócesis de Guadix: la Congregación Marta y María. Son tres hermanas -por el momento han llegado dos y se espera la legada de una tercera en los próximos días- que se dedicarán a atender la Casa Sacerdotal “San Juan de Ávila” de la diócesis de Guadix y todas las tareas relacionadas con ella. Su nueva casa forma parte de las instalaciones de esa casa sacerdotal, que, al llegar ellas, ha quedado también abierta ya y preparada para prestar sus servicios.
La bendición tuvo lugar al terminar la Misa de 12 de la catedral. Los asistentes, se desplazaron en procesión hasta la Casa Sacerdotal, acompañando al obispo y a las hermanas. Antes, en la Misa y como es preceptivo, se leyó la petición que hacía la superiora general de la congregación, Madre María Rutilia Carrera, al obispo de Guadix para que erija la casa religiosa para la nueva comunidad de la Congregación Marta y María. Después, se leyó el decreto de erección canónica de la misma en la diócesis de Guadix, donde se indica, además, que esta nueva comunidad se llamará “Casa Sacerdotal San Juan de Ávila en la ciudad de Guadix”, que colaborarán con la Casa Sacerdotal “San Juan de Ávila”, de Guadix, y que las hermanas prestarán sus servicios pastorales en las distintas actividades que designe el obispo.
El obispo agradeció a la congregación esta nueva comunidad de religiosas para la diócesis de Guadix, y a las hermanas que van a formar esta nueva comunidad -madre Marina, madre Florencia y la hermana que está por llegar- el servicio tan necesario que van a prestar a la diócesis accitana ayudando y sirviendo, como hizo Marta en el Evangelio, y orando por los demás y por la Iglesia, como hizo María.
La Congregación Marta y María
La Congregación Apostólica Marta y María fue fundada por Monseñor Miguel Ángel García Aráuz y la Madre Ángela Eugenia Silva Sánchez, en 1979 en la Diócesis de Jalapa (Guatemala). En la actualidad, la Congregación cuenta con más de 700 religiosas presentes en Guatemala, España, Venezuela, Honduras, Argentina, EEUU, Italia, Etiopía, Cuba y Lituania. Los fundadores quisieron distinguir al Instituto con el nombre de «Marta y María» para señalar los dos principios que rigen sus vidas: la contemplación de los misterios divinos (María) y la acción apostólica en el servicio generoso y desinteresado a los hermanos (Marta). Ambas facetas se funden en el amor al Señor, al modo de las santas hermanas de San Lázaro. A su vida de oración y contemplación en la intimidad con Jesús Eucaristía, unen el celo apostólico en el servicio a los hermanos y la Iglesia, que se cristaliza en la atención de niños discapacitados y huérfanos, personas drogodependientes, ancianos abandonados y otras obras de caridad.
En la diócesis de Guadix van a atender la Casa Sacerdotal “San Juan de Ávila” que, con la llegada de estas religiosas abre definitivamente sus puertas. Ya fue inaugurada y bendecida en 2018 y ahora, terminados los últimos flecos que quedaban y que dificultaban su apertura, con la llegada de las religiosas que la van a tender, puede decirse que queda abierta, en espera de los primeros sacerdotes que la ocupen. Es una casa sacerdotal pequeña, que cuenta con 15 habitaciones, cuatro de las cuales son para asistidos. Se trata de una residencia sencilla, adaptada y que cubre una necesidad que venía demandando la diócesis desde hace ya muchos años, como es la atención de sus sacerdotes mayores, cuando se retiran del trabajo pastoral.
Antonio Gómez