En este mes de febrero, en que celebramos la Jornada de la Vida Consagrada con el lema “Peregrinos y Sembradores de Esperanza”, El Papa Francisco, así como la Conferencia Episcopal Española, nos hacen un llamado para orar por las vocaciones a la Vida Consagrada. Por aquellas ya existentes que adornan a la Iglesia dentro de la riqueza de los distintos carismas, para que sean testigos misioneros de los valores del Reino en el mundo; y por aquellas que están aún en proceso de discernimiento y de ser llamadas al servicio del Reino.
Que el Espíritu Santo nos ayude a ser dóciles como María a la llamada y al envío del dueño de la Mies.
OREMOS JUNTOS
“Dios sigue llamando a los jóvenes también hoy, en ocasiones de maneras que no imaginamos.”
El papa Francisco inicia su reflexión volviendo sobre su propia experiencia: “Cuando tenía 17 años, era estudiante y trabajaba, tenía mis proyectos. No pensaba para nada en ser sacerdote. Pero un día entré en la parroquia… ¡y allí estaba Dios, esperándome!”.
Refiriéndose a los jóvenes, el papa nos motiva a orar y acompañar su camino. Así, “veremos cómo Dios hace cosas nuevas con ellos.”
El Papa nos invita a orar para que la Iglesia local sepa acoger y responder a la inquietud de los jóvenes en su discernimiento vocacional. Él nos dice que Dios sigue llamando: “a veces no lo escuchamos porque estamos muy ocupados con nuestras cosas, con nuestros proyectos, incluso con nuestras cosas de la Iglesia.”
No es momento de preocuparnos por la pobreza de vocaciones a la vida cristiana y de especial consagración, es momento de orar y de que “¡confiemos en los jóvenes! Y, sobre todo, ¡confiemos en Dios: porque Él llama a cada uno!”
PARA ORAR
Rosario Vocacional. Inquietar Agustinos Recoletos.
https://jovenesapm.org/wp-content/uploads/2022/05/Agustinos-recoletos_rosario_vocacional.pdf