El obispo, en la homilía de la festa de Santa Teresa Jornet, habló a las Hermanitas de los Ancianos Descampados, de Guadix, animándolas a seguir con su dedicación y entrega
El día 26, fiesta de santa Teresa de Jesús Jornet e Ibars, el señor obispo, don Francisco Jesús Orozco, presidió la santa Misa en la Casa Hogar de las Hermanitas de Guadix.
El prelado llegó a las 10’30 a la Casa Hogar Santa Teresa Jornet, situada en el barrio de la Estación, junto a la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús. A la puerta le esperaba la madre superiora y la comunidad, que lo saludaron con gran alegría y le agradecieron su presencia. También le saludaron con mucho cariño los ancianos presentes a su llegada, y a los que don Francisco Jesús abrazó y besó como un padre, mostrándoles su afecto y cercanía.
Posteriormente comenzó la Eucaristía, que fue concelebrada por el vicario general, el secretario canciller, el ecónomo diocesano, el capellán de las hermanitas, el arcipreste de Guadix y el sacerdote Leovigildo Gómez Amezcua, que reside, junto con don Antonio Cascales, en la casa.
El sr. obispo, en la homilía, glosó la figura de la Santa Madre Teresa Jornet, agradeció a las hermanitas su labor abnegada en favor de los ancianos, y las exhortó a ser fieles: “fieles como Santa Teresa Jornet las quiso y la Iglesia las necesita”. Les recordó las bellas palabras con que San Pablo VI elogió la vida de la Madre, y aludió también a las palabras con que el cardenal Taracón, en nombre de la Conferencia Episcopal Española, pidió a la Santa Sede que fuera nombrada patrona de la ancianidad.
Después, don Francisco Jesús, saludó también a los ancianos, trabajadores, asistentes a la Eucaristía y les animó a persistir en la labor de dar amor a todo el que está necesitado de afecto y de cuidados. Y les recordó las palabras de Jesús: «lo que hicisteis con uno de estos a mí me lo hicisteis”.
Antonio Fajardo