Este viernes 9 de agosto, se celebra en Lanteira el nacimiento del obispo y mártir Manuel Medina Olmos. Para Lanteira y para toda al Iglesia, el obispo Medina Olmos es importante, porque fue proclamado por el papa Juan Pablo II beato para la Iglesia y para el mundo. Manuel Medina Olmos fue martirizado el 30 de agosto de 1936, en los inicios de la Guerra Civil. Pero su testimonio de vida y de muerte ha sido todo un ejemplo para el mundo y, por eso, al Iglesia lo ha proclamado beato. Sin duda, es el lantierano más universal.
Quizá no haya grandes celebraciones este día 9 en Lanteira, dado que la fiesta litúrgica se celebra cada año el 30 de agosto, día de su martirio. Será entonces cuando tenga lugar el Triduo de preparación y la Misa y procesión en el día de la fiesta. Sin embargo, este 9 de agosto de 2019 no ha pasado desapercibido para los lanteiranos, ya que, al conmemorarse el 150 aniversario de su nacimiento -nació el 1869-, la parroquia de Lanteira va a vivir todo un Año Jubilar, al que invitan a toda la diócesis de Guadix y a los fieles de las diócesis vecinas de Granada y Almería, con las que el obispo Medina Olmos tuvo estrecha relación: en Granada porque fue obispo auxiliar, entre otras muchas dedicaciones; y en Almería porque fue administrador apostólico durante dos años y porque fue allí donde abrazó la palma del martirio.
El Año Jubilar del beato Manuel Medina Olmos comenzará el 30 de agosto de 2019, con una gran celebración en Lanteira, a las 19:30 horas, que estará presidida por el obispo de Guadix, D. Francisco Jesús Orozco. Será él quien abra la puerta a todo un año de gracia en la parroquia de Lanteira. Se espera que sean muchas las personas que, bien de manera individual o en grupo, visiten Lanteira y participen en sus celebraciones para ganar las gracias del Jubileo.
El obispo Manuel Medina Olmos nació en Lanteira el 9 de agosto de 1869. De familia humilde, cursó diferentes estudios que le llevaron a ser canónigo del Sacromonte de Granada y rector y profesor del colegio. También colaboró con el padre Manjón, llegando a ser subdirector de las Escuelas del Ave María. Fue nombrado obispo auxiliar de Granada en 1925 y pocos años después, en 1928, obispo de Guadix. También fue administrador apostólico de Almería, de 1934 a 1935. En los comienzos de la Guerra Civil, el 30 de agosto de 1936, le quitaron la vida en el barranco del Chisme, en Vícar, Almería, después de semanas de sufrimientos y humillaciones. Fue beatificado por el papa Juan Pablo II el 10 de octubre de 1993, en Roma.
Antonio Gómez