
Con San Lorenzo se inician los días en los que más fiestas patronales se concentran, en todo el año. Desde el 10 de agosto hasta pasada la fiesta de la Asunción de La Virgen, son muchos los pueblos que celebran a su patrón o patrona, aprovechando que los pueblos se llenan de quienes un día tuvieron que emigrar y de sus descendientes.
San Lorenzo fue celebrado en Beas de Guadix y en Graena, donde es el Patrón. Y en Pedro Martínez, se celebró la Santa Cruz. Procesiones, Misas y verbenas son los ingredientes típicos de estos días en nuestros pueblos.
Pero, si hay un día que se lleva la palma en las celebraciones, ese es el 15 de agosto, día de la Asunción de la Virgen a los cielos. En torno a este día se multiplican las celebraciones, ya sea de fiestas dedicadas a la Virgen, la mayoría, o a alguno de los santos patronos. Son muy pocos los pueblos donde no se celebre algo este día. En Lugros, por ejemplo, hubo romería con la Virgen hasta las afueras del pueblo, junto al río. Y en Cuevas del Campo, fue la Virgen de la Cabeza la protagonista de las fiestas. Zújar y otros pueblos del norte de la diócesis también tuvieron su día de fiesta
Y el 16 de agosto, San Roque, que también se celebra con devoción en algunos de nuestros pueblos, como es el caso de Campo Cámara o Alicún de Ortega. Y más adelante, la Virgen de Fátima en Polícar, San Agustín en Cogollos y Cúllar, el Beato Manuel Medina Olmos en Lanteira….
Pues eso, que en agosto las fiestas se multiplican y la fe nos invita a celebrar la alegría de vivir y de saber que tenemos a Dios, a la Virgen y los santos de nuestra parte y que podemos contar con ellos. La fe, sin duda, es motivo de celebración y la diócesis, casi toda la diócesis, está en fiestas en estos días de agosto.
Antonio Gómez
Delegado diocesano de MCS. Guadix