La Misa estuvo presidida por el obispo de Guadix y, al finalizar, el alcalde de Guadix ofreció flores a la Patrona en nombre de todos los accitanos.
El 15 de septiembre es la fiesta litúrgica de la Virgen de los Dolores, la advocación que mira a María a los pies de la cruz, en su máximo dolor al ver cómo crucifican a su Hijo. Los accitanos tienen en esta advocación de la Virgen su patronazgo, y la llaman Virgen de las Angustias, con su Hijo Jesús muerto en su regazo, tras ser crucificado. Aunque en la ciudad accitana se honra a la Virgen de las Angustias el segundo domingo del mes de noviembre, esta fiesta del 15 de septiembre no ha pasado inadvertida; al contrario, ha sido un día muy especial.
En la iglesia de la Virgen de las Angustias, donde está la imagen de la Patrona, se celebró una Misa, que estuvo presidida por el obispo de Guadix, D. Francisco Jesús Orozco, y a la que asistieron numerosos accitanos, devotos de la Virgen. También asistieron miembros del ayuntamiento, que, al finalizar la celebración, ofreció un ramo de flores a la Virgen en nombre de todos los accitanos. Fue su alcalde, Jesús Lorente, en nombre de todos, quien subió ese ramo de flores al camarín de la Virgen, como ofrenda de la ciudad de Guadix a su Patrona. Otras autoridades de la ciudad accitanas también asistieron a la celebración.
La Misa estuvo cantada por antiguos escolanos y con Rafael Pascual como organista. Antes, a las 8 de la tarde, se rezó el rosario. Y cuando llegó el obispo, fue recibido por el párroco, Valeriano Plaza, y la Archicofradía de la Virgen de las Angustias y miembros de otras hermandades del templo.
Sin duda, un año más, el 15 de septiembre ha sido un día especial, porque los accitanos han podido felicitar a su Patrona, la Virgen de las Angustias.
