Mons. Juan García-Santacruz, cumple hoy viernes 11 de enero 75 años de edad y, tal y como prescribe el Código de Derecho Canónico, ha presentado al Papa su cargo de Obispo de la diócesis accitana. Se trata de algo que tienen que hacer los obispos cuando llegan a la edad de 75 años, que figura como la edad de jubilación en las tareas pastorales, tanto para los obispos como para los sacerdotes. Sin embargo, esto no significa que el obispo de Guadix-Baza vaya a dejar de serlo de manera inmediata. Todo dependerá de lo que decida el Sumo Pontífice, “que proveerá teniendo en cuenta todas las circunstancias”, viene a decir el canon 401 del Código de Derecho Canónico. Mons. Juan García-Santacruz seguirá siendo obispo de Guadix-Baza mientras no se diga lo contrario y esta situación se puede prolongar durante meses e, incluso, durante años. Sólo después, cuando se nombre un nuevo obispo pasará a la condición de obispo emérito de la diócesis accitana.
Según indica el citado canon 401 de CDC, cumplidos los 75 años, el obispo debe “presentar la renuncia de su oficio al Sumo Pontífice”. Y así lo ha hecho Mons. García-Santacruz este mismo viernes en el que cumple los años, en una carta dirigida la Papa Benedicto XVI que introduce a la diócesis accitana en una situación nueva de expectativa.
Mons García-Santacruz lleva 51 años de sacerdote, de los cuales, los últimos 15 años los ha vivido como Obispo de Guadix-Baza. En estos años ha recorrido toda la diócesis varias veces y se ha sentido querido y arropado por sus diocesanos. Muestra de este cariño y reconocimiento es el hecho de que la ciudad de Guadix lo nombrara hijo adoptivo el pasado mes de abril, con el acuerdo de todas las fuerzas políticas representadas.
“Sólo he hecho lo que tenía que hacer” manifestaba recientemente cuando hacía balance de su ministerio episcopal, un trabajo que ha realizado con tesón, con entrega y, sobre todo, con cercanía y sencillez.
