El grupo Aral estuvo en Alquife el pasado sábado 12 de mayo. Interpretaron la obra «Simón, hijo de Juan», un musical sobre algunos momentos de la vida de San Pedro. Aunque, lógicamente, también estaba muy presente Jesús, quien cambió la vida de Pedro de manera radical.
El grupo Aral representó esta obra en Alquife, a beneficio de Proyecto Hombre Granada. Y fueron muchos los que se dieron cita esa tarde para pasar un buen rato al tiempo que ayudaban para una buena causa. Manuel Mingorance, director de Proyecto Hombre Granada, estuvo en la representación y agradeció a todos la colaboración.
La obra fue magnífica, tanto en música como en los demás elementos artísticos. Las canciones, el ritmo, las luces, los más de 60 actores,…. todo creó una atmósfera que acabó contagiando al público hasta el punto de que, cuando terminaba la obra, pudo acompañar a los actores en la danza final.
Aunque la representación fue el Alquife, estaban convocados todos los pueblos del Marquesado. De hecho, la iniciativa partió del Arciprestazgo y la convocatoria se ha hecho en las parroquias de la zona. Lo que se ha recogido se enviará a Proyecto Hombre Granada para que sigan con su noble tarea de rescatar a las personas que caen en las garras de la droga o de otras dependencias.
En la web del grupo Aral (http://www.grupoaral.es/ ) los actores relataban así la experiencia vivida en Alquife:
El día doce de mayo el grupo Aral tenía actuación programada en Alquife, nos reunimos en los Abades a las once, y salimos todos juntos hacia la nave en la que íbamos a representar el teatro.
Era un día caluroso (casi como si estuviéramos en pleno Agosto) y temíamos pasar calor todo el día dentro de una nave; sin embargo, al llegar, todo fueron sorpresas muy positivas: allí había gente esperando para abrirnos, en la nave hacía mucho fresquito, habían reformado el escenario y ahora era más grande…
Nos pusimos a montar, y aunque tardamos un poco más que otras veces, para después de comer ya estaba todo terminado y pudimos enfocar, ensayar y sonorizar… Los músicos y el coro vieron el teatro desde abajo una vez más.
A las siete empezamos a rezar y ya mientras rezábamos empezó a llegar gente… ¡qué nervios! ¡que no nos da tiempo! Corriendo acabamos de pintarnos y vestirnos, y a las ocho dio comienzo la obra, pero esta vez, como alguien dijo: «Voy a cambiaros los esquemas…» ¿Dónde está Bauti? ¿Por qué no sale a presentar la obra? Esta vez la presentación corrió a cargo de nuestro querido José María que es párroco de Jerez y que nos presentó a la gente del público, explicó quiénes éramos, por qué estábamos aquí… Después sacó a Manolo (director de Proyecto Hombre) e incluso a la concejala del Ayuntamiento de Alquife, y así se escondió un poco más el sol y pudimos empezar.
La obra fue muy bien, los músicos tan cerca del público pudieron ver cómo la gente daba palmas, bailaba e incluso se quedaba boquiabierta en algunas escenas.
Después recogimos, cosa que hicimos muy rápido y cenamos algo.
Nos fuimos de Alquife pensando eso que dijo Bauti antes de comenzar la obra: El Señor nos da más de lo que nosotros podemos pedir, y nos hace irnos siempre con el corazón lleno.
