
Con una procesión por las calles de Guadix terminó la celebración del Corpus Christi en la ciudad accitana. Antes, a las 6 de la tarde, se celebró la Eucaristía, en la Catedral, en la que bailaron los Seises, como es tradicional. La Misa estuvo presidida por el obispo y concelebrada por el cabildo y los sacerdotes de Guadix. Asistieron las autoridades civiles, militares y de seguridad de la ciudad, así como el alcalde y miembros de la corporación municipal.
D. Francisco Jesús Orozco, en la homilía, recordó testimonios de santos y de mártires sobre la Eucaristía. También recordó que, en la solemnidad del Corpus, la Iglesia celebra el Día de la Caridad y, por tanto, el Día de Cáritas. Agradeció la labor que hace Cáritas en la diócesis, tanto a nivel parroquial como diocesano, refirió algunos datos de las personas que fueron ayudadas en 2024 y los proyectos que se emprendieron, aludiendo a la Memoria de Actividades de Cáritas que se presentaba ese día.
También, animó el obispo a vivir y querer la Eucaristía: “Que en esta solemnidad se nos renueve el asombro de un Dios que escandalosamente quiere caminar con nosotros y nos quiere invitar a mirar al cielo para que, en medio de tanta putrefacción, de tanta corrupción, de tanta mentira, recobremos la verdad en la que hemos sido creados, visitemos al señor en el Sagrario. Seamos adoradores del Santísimo Sacramento. Vivamos con intensidad la Eucaristía, no por cumplir, dejémonos transformar por él. Y, en estos momentos, pidamos la necesaria paz en el mundo y el cese de todos los conflictos bélicos. El Papa lo decía esta mañana: la guerra nunca será la solución. Dios está con nosotros y quiere caminar con nosotros, vengamos a celebrar la Eucaristía. Vivamos el Corpus como el mejor regalo de amor para el mundo y para nosotros. Vivamos la misa con fe viva. Recibamos al Señor con un corazón limpio. Seamos portadores de esperanza”, dijo el obispo.
Y terminó animando a vivir la Eucaristía también a los más pequeños, a los niños y niñas que han hecho la Primera Comunión en Guadix, que estaban en la celebración y que luego iban a salir en la procesión, delante de la custodia, con sus trajes impecables.
Al finalizar la Misa, los Seises bailaron delante del Santísimo, con su traje de color granate, reservado solo para esta fiesta. Es una tradición de la ciudad de Guadix, que este año cumple 75 años desde que fueron recuperados para la Catedral accitana.
Después, tras la Misa, se inicio la procesión con la custodia y el Santísimo por las calles de Guadix, engalanadas para la ocasión y enriquecidas con altares y mucha devoción. El obispo, el clero, las autoridades, todas las hermandades de Guadix, los Seises, los niños de Primera Comunión y muchos fieles salieron en la procesión. También lo hicieron los trabajadores y voluntarios de Cáritas, protagonistas en este día de la Caridad. Y, por supuesto, también salió la Hermandad del Santísimo, de la Catedral, que es la encargada de organizar la celebración del Corpus Christi con toda solemnidad. Y así lo hicieron un año más.
Antonio Gómez
Delegado diocesano de MCS. Guadix