Ya conocemos cómo será el escudo episcopal y el lema que D. Francisco Jesús Orozco, obispo electo de Guadix, ha escogido para que identifiquen su ministerio episcopal. Se trata de un lema y un escudo que, según la tradición de la Iglesia, identificarán al obispo a lo largo de su vida y que deberán tener, sin duda, un gran valor simbólico. Con estas dos intenciones, D. Francisco Jesús Orozco ha presentado un escudo que será estrenado el próximo 22 de diciembre, cuando sea ordenado obispo de Guadix, en el que se incluye el lema de su episcopado: “Tus heridas nos han curado” ( 1 Pe 2,24). La celebración de ordenación tendrá lugar en la catedral accitana, a las 11 de la mañana y, a partir de ese momento, el escudo estará presente en los escritos del nuevo prelado y en los eventos a los que asista.
En el escudo de D. Francisco Jesús Orozco aparecen varios elementos simbólicos. Aparece como motivo central el Pelícano místico como símbolo cristológico y eucarístico; el fondo de color verde hace referencia a la vida eterna y la esperanza, que la Sta. Madre Iglesia actualiza y anuncia.
El Pelícano piadoso ha anidado, (en forma de ‘M’, en alusión a la siempre Virgen María) con las uvas y espigas del Sacrificio Eucarístico, con las flores del girasol y el algodón, trabajo de la campiña cordobesa, las riberas del Guadalquivir y Villafranca de Córdoba, donde reina la Stma. Virgen de los Remedios, representada también con el fruto de la higuera, inscrito en la estrella de la triple virginidad, que su sagrada imagen porta en su mano derecha. ‘El fruto de la tierra y del trabajo de los hombres’, será por virtud de la Gracia, Sacramento de Salvación.
El pueblo natal de D. Francisco Jesús Orozco aparece representado mediante su característico puente y parte del escudo municipal con las agujas que nimban y coronan al Sacro Ave, signo asimismo de la restauración obrada por el Sacrificio salvífico de Cristo.
Descripción heráldica:
El escudo tiene los siguientes elementos:
En campo de sinople: Pelícano místico en plata, nimbado de oro y coronado de dos agujas cruzadas en sable; bajo el Ave, nido en forma de ‘M’ de espiga, girasol, flor de algodón y racimo de uvas y breva inscrita en estrella española de oro, frutas todas en su esmalte natural. En punta: el puente de Villafranca de Córdoba, en gules.
A cola: cruz episcopal, de oro, trebolada.
Al timbre: de sinople, capelo episcopal.
La divisa prelaticia reza: LIVORE TUO SANATI SUMUS (“Tus heridas nos han curado”)