La Comunidad de Shalom de Granada, formada por cinco jóvenes brasileños, acaba de cumplir un año en nuestra Diócesis. Granada es la primera diócesis en España en acoger a la Comunidad Católica Shalom.
Hace ya un año que los cinco jóvenes brasileños de la Comunidad de Shalom llegaron a Granada para implantar su Carisma en nuestra Diócesis.
Los miembros de la Comunidad, en acción de gracias por este aniversario, celebraron la Eucaristía y adoración al Santísimo en la iglesia de San Antón, a la que asistieron amigos y personas próximas a la Comunidad, y al terminar la misa, algunos de ellos ofrecieron un testimonio sobre cómo surgió la Comunidad en Granada.
Los miembros de la Comunidad de Shalom realizan una misión evangelizadora con jóvenes, a través del arte, de la música y de la formación. En Granada colaboran en muchas iniciativas con la Pastoral de Juventud y con la Pastoral Universitaria, y también dan catequesis en Deifontes e Iznalloz.
Nuestro Arzobispo participó hace dos años en el «Festival Aleluya», que celebra en verano la Comunidad de Shalom en Fortaleza, en Brasil, y que concentra a miles de jóvenes que viven la fe cristiana a través del baile, la música, la danza y el teatro.
Noche de oración y alabanza
La Comunidad de Shalom organiza desde octubre una iniciativa de oración y celebración de la Eucaristía, todos los jueves, en la iglesia de San Antón, de 20:30 a 22:30 horas.
Esta iniciativa consiste en compartir un rato de oración y alabanza con las hermanas clarisas capuchinas que residen en el Convento de San Antón, y con todo aquel que quiera participar. Hay un momento de Adoración al Santísimo, de oración personal y de alabanza y cantos al Señor.
Antes de comenzar la oración, y durante el principio, dos jóvenes de la Comunidad Shalom se quedan en la puerta de la iglesia invitando a las personas que pasen por allí a participar, como una forma de evangelización en la calle.
Carisma
La Comunidad Católica Shalom nació hace 30 años en el estado brasileño de Fortaleza, cuando, por iniciativa de jóvenes universitarios bajo la orientación de Moysés de Azevedo y el apoyo del Arzobispo de Fortaleza, abrieron un local de bocadillos unido a una librería para la acogida y la evangelización de los jóvenes, que dio lugar al primer Centro Shalom. Tres décadas después, la Comunidad Católica está presente en 8 países de todo el mundo y cuentan con unos 2.300 miembros. Además, hay más de 30.000 personas relacionadas con este carisma, que utiliza las artes escénicas y la cultura como medio de evangelización especialmente entre los jóvenes.