La parroquia de Santo Tomás de Villanueva pone en marcha grupos de acogida y acompañamiento de separados y divorciados.
Las rupturas matrimoniales –hombre y mujer que se dieron el «sí, quiero» para toda la vida- son una herida que llevan en su corazón muchas personas, especialmente si hay hijos. Por eso, y con el objetivo de acompañar y ayudar a sanar esta herida, la parroquia de Santo Tomás de Villanueva acoge los sábados del mes de octubre unas jornadas para personas separadas y divorciadas, que quieren afrontar este duelo desde la fe.
Las sesiones comienzan el 1 de octubre, con el tema «El porqué de un Grupo Cristiano de separados y divorciados. Acogida y acompañamiento», a cargo del agustino recoleto padre Ángel Antonio García Cuadrado, párroco de Santo Tomás de Villanueva, donde se llevará a cabo esta iniciativa.
El sábado día 8, la psicóloga Isabel Belda hablará sobre «El duelo que hay que elaborar tras la pérdida»; el día 15, «El perdón, indispensable en el proceso de sanación», sobre el que hablará el salesiano padre Manuel Bellmunt, Doctor en Teología; y el día 22, «La crianza y la educación de los hijos, una responsabilidad que debe ser compartida», a cargo de la Orientadora familiar del Centro de Orientación Familiar Ronda 110 de Granada, Rosa López. Todas las sesiones se celebrarán en la parroquia Santo Tomás de Villanueva, a las 20 horas. Más información en el teléfono 958-271-516.
DOS GRUPOS
Estas jornadas son el inicio de dos grupos –»Acogiendo y compartiendo» y «Amigos en Jesús y con Jesús»- que se ofrece a las personas separadas y divorciadas durante todo el año. El primero de estos grupos tiene como objetivo, entre otras cosas, acompañar en la superación del duelo de una ruptura en el matrimonio, promover el perdón como instrumento de paz y reconciliación, consigo mismo y con la pareja, y ayudar a restaurar el estado de ánimo y la autoestima. Se reunirán los sábados impares a las 19:45 horas, también en dicha parroquia. El segundo («Amigos en Jesús y con Jesús») es un grupo de profundización en la fe, con un tiempo de oración comunitaria y desarrollo de un tema de formación cristiana, que se reunirá los sábados pares, también a las 19:45 horas y en la misma parroquia.
Esta iniciativa se enmarca en el Año de la Misericordia y se auspicia bajo el mismo lema con el que el Papa Francisco nos convocó en este tiempo de gracia: Misericordiosos como el Padre.