En el mes de abril, el Papa Francisco invita a la Iglesia a unirse en oración por todos los jóvenes del mundo para sean protagonistas y constructores de un nuevo futuro.
El Papa Francisco propone a la Iglesia como intención de oración para el mes abril el rezo por todos los jóvenes del mundo, jóvenes que no se conforman y apuntan alto, para que sean protagonistas y constructores de futuro.
Asimismo, el Santo Padre lanza el reto a la juventud de involucrarse en trabajar por un mundo mejor respondiendo con generosidad a su propia vocación y movilizándose por las grandes causas del mundo.