Casi dos millones de personas han disfrutado, a lo largo de cinco días, del 18 al 22 de julio, del Festival Aleluya, que organiza la Comunidad Católica Shalom en Fortaleza (Brasil), un carisma suscitado en 1997 por el Espíritu Santo, que pronto llegará a la Diócesis de Granada.
Este Festival, el mayor de arte integrado en Brasil, atrae la atención de miles de jóvenes, que han descubierto que hay una forma diferente de diversión, sin por ello renunciar a una vida plena y verdadera, encontrada en la fe cristiana. Con esta propuesta lúdica, sus participantes testimonian la fe a través de las artes escénicas, y a ella asistieron no sólo cristianos, sino también miles de jóvenes movidos inicialmente por el atractivo de la música, conciertos de rock, el baile, la danza y el teatro.
Frente a la propuesta de los fines de semana de alcohol, los jóvenes de la Comunidad Católica Shalom viven su particular «botellón»: el «botellón de la fe, ya que miles de jóvenes coparon los espectáculos que en este Festival se llevaron a cabo, como cualquier joven de su edad. Como ejemplo de la iniciativa y testimonio cristiano vivo en el marco de esta fiesta, 600 jóvenes de la Comunidad Shalom grabaron en la playa un vídeo promocional de este Festival.
Mons. Martínez
En el Festival Aleluya, nuestro Arzobispo, Mons. Javier Martínez, fue invitado a disfrutar de él, lo que le ha permitido conocer aún más de cerca este carisma, que testimonia a Cristo con esta propuesta honesta y sana para el ocio al término de las vacaciones, en Brasil. Entre otros momentos, Mons. Martínez concelebró la Eucaristía de clausura, junto al Obispo de Sau Paulo.
La Comunidad Católica Shalom, fundada por Moisés Acevedo, cumple 30 años y es la impulsora del Festival, que ahora celebra su 15 aniversario. Un numeroso grupo de jóvenes de este carisma estuvo en Granada el pasado año, durante la celebración de los Días en las Diócesis, previos a la Jornada Mundial de la Juventud Madrid 2011. El próximo año, este encuentro mundial del Papa con los jóvenes será en Río de Janeiro, y el Festival Aleluya se convertiría en un anticipo de la JMJ Río 2013.