Erigida por el Arzobispo para ayudar a su recuperación, se constituye como Asociación Pública de Fieles, a la que pueden pertenecer todos los fieles cristianos, tanto clérigos como laicos, sean o no granadinos y vivan o no en Granada.
El Arzobispo de Granada, Mons. Javier Martínez, ha erigido la “Asociación de Amigos de la Abadía del Sacromonte”, constituyendo con ella una Asociación Pública de Fieles en la Archidiócesis de Granada para ayudar a su recuperación.
La Asociación está abierta a todas las personas que se interesan y tienen afecto a la misión de la Iglesia en la Abadía del Sacromonte y quieren cooperar con esa misión, sean o no granadinas, y vivan o no en Granada.
En esta nueva Asociación Canónica pueden inscribirse todos los fieles cristianos, tanto clérigos como laicos, así como las personas privadas y públicas eclesiales, y cuantas personas físicas, o instituciones y personas jurídicas de naturaleza civil, españolas o de otras partes del mundo, acepten el espíritu de la Asociación, y colaboren económicamente en la restauración y el mantenimiento de la Abadía y en que ésta pueda contribuir a los fines que le son propios.
Tanto para las inscripciones para ser miembro de esta Asociación como para los donativos para la Abadía, las personas interesadas pueden dirigirse a la Curia Metropolitana (Plaza Alonso Cano, s/n). También pueden remitirse a la propia Abadía, precisando en el envío que el destinatario del donativo es la Abadía del Sacromonte o La Asociación de Amigos de la Abadía del Sacromonte. La inscripción mínima para ser “amigo” de la Abadía es de 20 euros al año, una inscripción simbólica con la que se ayuda a la recuperación del patrimonio de la Iglesia de Granada.
La Abadía del Sacromonte está constituida por un conjunto de edificios y un espacio en torno a ellos singularísimo, emblemático para la ciudad de Granada, y muy importante también para la historia de la Iglesia. La Abadía del Sacromonte es un centro de evangelización, de memoria, de oración, de peregrinación, de estudio y de caridad.
