Mons. Javier Martínez, Arzobispo de Granada, explica qué significa «Destinados a proclamar las grandezas del Señor», lema de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos.
Para poder vivir el presente con gozo y el futuro con esperanza, necesitamos tener la conciencia de que el Señor -dicho en un lenguaje del Antiguo Testamento- ha estado grande cono nosotros. Es decir, tenemos que hacer memoria, o tenemos que tomar conciencia, de todo el bien que el Señor nos da. De cómo la historia, a pesar de todos nuestros pecados, y uno de los pecados más grandes de la Iglesia es nuestra desunión del Cuerpo de Cristo y su fractura –lo que a veces se llaman «iglesias diferentes»-, esa desunión, que es un pecado enorme, no puede oscurecer el hecho de que el Señor nos ha comunicado su Vida divina y nos ha llamado a la filiación divina haciéndonos hijos de Dios en el Hijo. Cuando tomamos conciencia de que ése es el gran don que el Señor nos ha dado, desde ese don, inevitablemente, nos acercamos unos a otros. Es decir, nos empieza a dolor el pecado y el escándalo de nuestra división, y nos vamos como orientando hacia el centro. En la medida en que nuestra mirada se fija en el Señor, miramos al otro con unos ojos diferentes, más parecidos a cómo el Señor nos mira a nosotros. Y ésa es la mirada que tenemos que adquirir si deseamos la unidad.
+ Javier Martínez
Arzobispo de Granada
Extracto de la entrevista en «El Espejo», de Cope
20 enero de 2016
A partir del minuto 12.
