El sábado 21 de septiembre tenía lugar la primera reunión de este curso pastoral en la Casa de Espiritualidad San Antonio en Córdoba.
Comenzó la jornada con la oración inicial y saludó de don Demetrio Fernández a todos los presentes. Junto a él, el nuevo delegado diocesano de Apostolado Seglar, Salvador Ruiz, tomó la palabra en el primer turno de intervención para impartir una breve ponencia sobre la identidad y misión del laico en la Iglesia. Salvador Ruiz puso el acento en la unión con Jesucristo, la comunión eclesial, el sentido misionero y el acercamiento a los pobres.
A continuación, Francisco Gómez San Miguel, presidente de la Agrupación de Cofradías de la ciudad, informó ampliamente sobre el Viacrucis Magno celebrado en Córdoba el pasado 14 de septiembre. Realizó una exposición sobre los preparativos, las motivaciones y explicó su desarrollo. Destacó la gran devoción y silencio de los participantes y asistentes al Viacrucis. Se calculan que cerca de doscientos mil personas participaron en el mismo.
Como tercer momento de la jornada, don Demetrio Fernández presentó su carta pastoral al inicio del curso 2013-2014, «Córdoba: una diócesis en estado de misión. En el año de Osio, confesor de la fe, obispo de Córdoba», resumiendo y glosando sus distintos aspectos. Entre ellos, la necesidad de estar en estado de misión, el Año de la Fe, el Año jubilar de San Juan de Ávila, el próximo Congreso sobre Osio de Córdoba, lectura de Lumen Gentium en el marco de los 50 años del Concilio Vaticano II, el estudio de los Sacramentos en el marco de los 20 años de la publicación del Catecismo, el tema de los pobres en la Iglesia, la cultura, etc.
La sesión se reanudó con la propuesta del Obispo sobre la Acción Católica General y la necesidad de su implantación en todas las parroquias. Con esta iniciativa, se busca articular ese laicado que vive, se nutre y participa en la vida de la parroquia.
Don Demetrio Fernández aprovechó la ocasión para presentar al nuevo presidente diocesano de ACG, Salvador Ruiz, que ya es delegado diocesano de Apostolado Seglar, y al nuevo consiliario diocesano, Jesús Poyato, actual vicario de la ciudad.
Por último, hubo turnos de intervenciones de los distintos miembros, que tuvieron oportunidad de presentar sus trabajos, sugerir iniciativas, hacer preguntas y propuestas, asumir y subrayar distintos aspectos de los tratados en esta sesión de comienzo del curso pastoral. A las 14 horas concluyeron los trabajos con el rezo del ángelus.
