El sábado, 24 de octubre, se ha celebrado en la Iglesia del Juramento la solemnidad de san Rafael, custodio de la ciudad. Presidida por el Obispo, y concelebrada por algunos representantes del Cabildo y el párroco de San Lorenzo, ha contado con la participación de numerosos cordobeses.
La Iglesia del Juramento, donde tuvo lugar las apariciones del Arcángel al Padre Roelas, ha acogido el 24 de octubre la celebración solemne del Custodio de la Ciudad. A las 10:30 daba comienzo esta celebración eucarística presidida por el Obispo y concelebrada como es tradición por el Cabildo de la Catedral. En las primeras bancas, autoridades civiles, representantes de la Agrupación de Cofradías y de la Hermandad de San Rafael, así como miembros de la Policía Local y de la Guardia Civil.
En la homilía, don Demetrio Fernández ha recordado quiénes son los ángeles y la labor de protección que en concreto el Arcángel realiza sobre los habitantes de la Ciudad. «Su tarea de protección nos recuerda el amor de Dios a la humanidad», ha aseverado, para después hacer mención al valor de una sana religiosidad para nuestra sociedad, «la religión es buena, no somos unos apestados», ha recordado el Obispo, aludiendo a los que desean suprimir la enseñanza de la Religión en las escuelas. Finalizando la homilía, don Demetrio ha encomendado a la protección de San Rafael a los más sencillos y necesitados, a las autoridades civiles que velan por el bien común y a los difuntos.
BENDICIÓN DE UNA NUEVA IMAGEN
Al concluir el pontifical, se ha bendecido una imagen de San Rafael que ha sido situada en unos de los patios de la Iglesia del Juramento. La escultura procede de un antiguo monasterio, cercano a San Jerónimo de Valparaiso en la sierra cordobesa.