Esta semana el sacerdote Antonio Gil hace un reccorido por la semana más importante del año
Nos disponemos ya a celebrar la semana más importante del año, la Semana Mayor, la Semana Santa, sin procesiones por nuestras calles, debido a la pandemia que nos golpea todavía, pero con la devoción y el fervor a punto, en torno a nuestras imágenes. Será, sobre todo, una Semana Santa del corazón. Desde el Domingo de Ramos, hasta el Domingo de Pascua, la liturgia de la Iglesia, esplendorosa y magnífica, nos hace revivir intensamente el drama de la pasión y muerte de Jesús, coronada con el esplendor de su Resurrección.
Domingo de Ramos: Este domingo, llamado «de Ramos», nos sitúa en el pórtico de los días santos de nuestra redención. Se trata del máximo drama de la humanidad, el de su propia redención. Jesús nos invita en estos días a vivir su cruz. En estos dias santos revivimos la muerte de Jesús para resucitar con él y en él. Y este es el sentido de la aclamación hoy del pueblo sencillo a Jesús. Aplaude la victoria contra el mal, contra el orgullo y la violencia. Y aplaude nuestra gloriosa resurrección en él.
Martes santo: Misa crismal en la Catedral, presidida por nuestro obispo, en la que los sacerdotes renuevan sus promesas sacerdotales, respondiendo a la pregunta del prelado: «¿Queréis uniros más fuertemente a Cristo y configuraros con Él?».
Jueves Santo: El lavatorio de los pies, el mandamiento nuevo, la institución de la Eucaristía, la institución del sacerdocio. Humildad y servicialidad plena; amar al mundo como Dios lo ama, y al prójimo como Dios nos ama; aprender para siempre «la cultura de la eucaristía» y contemplar a los sacerdotes como «otros Cristos» en medio de nosotros.
Viernes Santo:La Cruz, trono de amor, cátedra de sabiduría y fortaleza, árbol de vida eterna, altavoz universal de salvación.
Vigilia pascual: En la Vigilia pascual, todo es nuevo. La bendición del fuego, la luz del cirio pascual, el agua de las pilas bautismales, símbolo de vida. Cristo resucitado se hace presente en medio de nosotros.
Domingo de resurrección: Un doble compromiso. Primero, resucitar las «zonas muertas» de nuestra vida. Segundo, transmitir la resurrección de Jesús a los demás, no sólo como «enseñantes» sino como «testigos» de su vida nueva.
La entrada La Semana Santa del corazón en Al Trasluz apareció primero en Diócesis de Córdoba. Ver este artículo en la web de la diócesis