Este es el lema escogido para la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico 2015, haciendo referencia a la prudencia, una de las cuatro virtudes cardinales junto con la justicia, la fortaleza y la templanza.
Comienzan las vacaciones y son miles las personas que se desplazan por carretera todos los días. Por eso, la CEE lanza como cada año la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico. En el mensaje episcopal emitido para dicha jornada, los responsables de la pastoral han pedido extremar las precauciones y han recordado que «la prudencia es la virtud que dispone la razón práctica a discernir en toda circunstancia nuestro verdadero bien y a elegir los medios rectos para realizarlo».
Además, haciendo referencia a los datos proporcionados por la DGT en los que se pone de manifiesto que el 22% de los accidentes mortales en nuestras carreteras son debido a las prisas al volante, han recordado que sería conveniente tener presente unas palabras de Santa Teresa, justamente en este año en que se cumple el V Centenario de su nacimiento: «Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa, Dios no se muda, la paciencia todo lo alcanza, (…)».
Asimismo, el día 5 de julio, fiesta de San Cristóbal, se encomendará en la eucaristía a todos aquellos que van a salir de viaje durante el verano.