Los avances científicos y tecnológicos en estas últimas décadas en el campo de las ciencias de la vida, exigen una actualización por parte de quienes integramos la sociedad, que nos permita dar respuesta a los nuevos retos que se nos plantean.
Con tal fin, organizadas por el Foro de Bioética Francisco Suárez, del Centro Cultural San Hipólito, durante los días 11 y 12 tuvieron lugar las IV Jornadas de Bioética bajo el lema “Ante el comienzo de la vida”. En estos días, se desarrollaron distintas ponencias por cualificados especialistas en Biología, Medicina, Ética, etc., seguidas de un vivo coloquio. En éstas quedó patente el respeto que la vida del ser humano no nacido merece, a lo largo de las distintas fases por las que atraviesa, desde la concepción al nacimiento. Ciertamente, como se manifestó a modo de presupuesto ya en la primera ponencia: “Una ciencia sin conciencia se convierte en una amenaza…, pero una conciencia sin ciencia implica un engaño peligroso, en un mentira que desacredita a quien la enseña” (Eduardo López Azpitarte, S.I.). Esta interacción entre ciencia y conciencia y viceversa, es clave para la intelección de ciertas cuestiones que hoy día acaparan nuestra atención.