El salón de actos Cajasur (Gran Capitán) acogió ayer la ponencia «La libertad religiosa en la España actual» de Ricardo Latorre. El acto organizado por Presencia Cristiana, forma parte de las sextas Jornadas de Primavera.
Con el título «La libertad religiosa en la España actual», el sacerdote Ricardo Latorre impartió ayer, día 8 de mayo, la primera de las Conferencias de Primavera organizadas por la Asociación Presencia Cristiana.
El acto tuvo lugar en el salón de actos Cajasur y comenzó con la intervención de la Presidenta de la Asociación, Antonia Jiménez, quien manifestó que desde la Asociación han propuesto este primer tema motivados por la situación actual en España de «menosprecio e intolerancia hacia la religión católica, mayoritaria en nuestro país, por parte de personas e instituciones que con frecuencia hieren profundamente los sentimientos de numerosos ciudadanos que se confiesan católicos». Seguidamente, presentó al conferenciante, que disertó sobre la influencia de la religión en la vida de los ciudadanos.
Al comienzo de su intervención el sacerdote misionero defendió la importancia de la libertad religiosa entendida como un derecho inalienable de todo ser humano. A pesar de ello, «la realidad nos demuestra cómo esta libertad religiosa es vulnerada en muchos países del mundo hoy en día», afirmó.
Posteriormente, fue aclarando el sentido de conceptos que manejamos con cierta frecuencia y su relación con la libertad religiosa, como pueden ser: el estado confesional, aconfesional o laico, el diálogo interreligioso, el criterio de la reciprocidad, etc.
Respecto a la situación actual de España el ponente sostuvo que a pesar de que nuestro ordenamiento jurídico respeta la libertad religiosa y que en este sentido, nuestra situación es modélica en comparación a la situación vivida en otros países,» esta libertad no es en absoluto completa y tiene mucho que mejorar en el ámbito familiar, profesional, de los medios de comunicación y la enseñanza».
Finalmente, propuso que «ante los atentados a la libertad religiosa no dejemos de utilizar los medios que el estado de derecho pone en nuestras manos para defender nuestra libertad» y que «no nos inhibamos en la manifestación de nuestra fe por unos falsos respetos que no hacen sino reforzar las posiciones de los que atentan contra la libertad religiosa».
Tras su intervención se celebró un interesante coloquio entre el ponente y el público.
