La Misión Diocesana en Nueva Carteya y Llano del Espinar fortalece la fe y el compromiso misionero de todos
Sacerdotes, religiosas y laicos estuvieron ayer en Nueva Carteya y Llano del Espinar, en el marco de la Misión Diocesana que allí se está desarrollando, visitando a los habitantes puerta a puerta para llevarles a todos la alegría el Evangelio.
Tras celebrar la misa en la parroquia por la mañana, los misioneros se dispusieron a acercarse a las personas para transmitirles la importancia de tener al Señor en el centro de nuestra vida. Puerta a puerta fueron llamando a alejados o indiferentes, recibiendo “verdaderos regalos de Dios”, como aseguran los participantes en la Misión, hasta celebrar la misa en el cementerio pidiendo por todos los difuntos y profundiza en “El fin del hombre, el sentido de la vida”.
Juanjo Morente es uno de los participantes en esta Misión Diocesana. Comenzó ayer el visiteo “asustado”, porque no es algo habitual para él. Recuerda que empezó a tocar las puertas y nadie les abría hasta que llegó la primera persona que lo hizo. “En el primer abrazo que hemos recibido, hemos cogido fuerza para toda la semana”, aclama Juanjo, quien desvela que durante la jornada los han acogido con cariño y se han abierto a conocer la existencia de Dios. “Llevarle al Señor ha sido una experiencia maravillosa y sorprendente a la vez, puesto que hemos descubierto que no éramos nosotros solos los que llevaban al Señor, sino que ellos lo tenían guardado para nosotros sin saberlo”, asegura.
Ángel Espinosa se dispuso a descubrir la gloria de Dios en cada persona, la obra que Él está haciendo. “Reconocer el amor de Dios que cada persona recibe y encontrarte con ese amor y esos instrumentos de los que el Señor se vale para ofrecerle su amor a todas las personas, es increíble”, indica.
También los fieles de la localidad han podido sentir más fuerte que nunca ese amor. Eva María Priego constata que la Misión le está ayudando a abrirse al Señor. “Estoy viviendo esto con bastante fe, muy abierta a todo lo que el Señor me quiere, en condición de acercarme a Él, de confiar en Él y de refortalecer mi unión con Él”, añade Eva María quien espera que la mayoría de los feligreses lo sientan como ella y vivan intensamente estos días.
Oración, visiteo y encuentros día a día
Cada día, el rezo del santo rosario por las calles de la localidad inaugura la jornada de la Misión, a las 7:30 horas, en el entorno de la parroquia de San Pedro. En la jornada de este martes, fieles y misioneros podrán profundizar en “El pecado, rechazo del amor de Dios”.
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