Sacerdotes, laicos, voluntarios y religiosos procedentes de varios rincones de España, se unieron el pasado fin de semana para conmemorar el segundo aniversario de la Beatificación del Padre Cristóbal de Santa Catalina.
El eremitorio del Bañuelo acogió esta jornada que comenzó con la intervención de la Superiora General de la Congregación de Jesús Nazareno, la Hermana Leonor Copado, encargada de dar la bienvenida a todos los presentes. Acto seguido, tuvo lugar la celebración de la Eucaristía de acción de gracias y el rezo de un Vía Lucis por los alrededores del lugar. La jornada concluyó con diversas actividades lúdicas.