El estado de conservación en la que se encontraba tras un acto vandálico recientemente acaecido y por los efectos del paso del tiempo, ha llevado al Cabildo Catedral de Córdoba a tomar la decisión de restaurarla.
Este retablo de piedra data del año 1740, cuando la fábrica de la Catedral hizo esta hornacina y D. Manuel Esparza, administrador del puente, donó la imagen y la reja.
La imagen actual es un vaciado de la anterior (copia) y fue realizada por el escultor valenciano Amadeo Ruiz Olmos en 1938 y restaurada por Miguel Arjona en 1990.
Bajo la supervisión técnica de los arquitectos conservadores de la catedral, Gabriel Ruiz Cabrero, Gabriel Rebollo y Sebastián Herrero, el arquitecto técnico Juan Requena y la técnico en conservación y restauración Anabel Barrena, se ha realizado la obra de restauración de esta pequeña hornacina situada en el exterior del muro sur de la catedral.
La empresa construcciones Joaquín Aguilera, bajo la vigilancia del responsable de mantenimiento y conservación del Cabildo, Miguel Espejo, han sido los encargados de ejecutar la restauración, la cual ha consistido en la restitución de los sillares deteriorados, labrando las piezas dañadas en piedra de las mismas características que la original, la restauración de la reja que protege la imagen y la reposición de la decoración interior de la hornacina.
Esta restauración ha tenido un coste de 36.390 euros, financiados íntegramente por el Cabildo de la Catedral. Como resultado final se ha recuperado el estado original de la hornacina de Ntra. Sra. del Pilar.
