Ante la imagen de la Virgen de la Caridad, el cartagenero José Miguel Jiménez Atiénzar recibió el Orden Sacerdotal. La Diócesis de Cartagena cuenta desde el pasado sábado con un miembro más entre su presbiterio diocesano. José Miguel Jiménez Atiénzar recibió el Orden Sacerdotal tras un tiempo sirviendo como diácono en las parroquias de Mazarrón. La Real Basílica de Nuestra Señora de la Caridad de Cartagena acogió esta celebración en la que participaron numerosos sacerdotes, así como compañeros seminaristas, familiares y amigos del ordenando que llenaron el templo por completo, y que, además, fue retransmitida en streaming en el canal de YouTube Virgen de la Caridad. «Cuando te busquen, te reconocerán como un hombre de Dios» El obispo de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, recordó al ordenando que su meta seguirá «ser siendo santo, un cura santo». En la tarea hacia la santidad le pidió mirar a los demás «con cariño y amor, rechazando las críticas» y tender siempre la mano al prójimo: «Tú eres –y seguirás siendo como sacerdote– el rostro de Cristo para la gente. Cuando te busquen, te reconocerán como un hombre de Dios». Exhortándole a poner su vida en manos de Dios y de toda la Iglesia y siendo su misión la de «ayudar a los hermanos a encontrar el camino hacia el cielo», el prelado repasó los aspectos de la santidad a tener en cuenta que el Papa Francisco resalta como expresión del amor de Dios y al prójimo, como son la vida en comunidad, «prestando atención a los pequeños detalles»; la audacia y el fervor, ya que «la Iglesia necesita misioneros entusiasmados»; la perseverancia, la paciencia y la mansedumbre; vivir con alegría y sentido del humor, «con espíritu positivo y esperanzado incluso en los momentos difíciles»; y la oración constante «para vivir siempre al lado de Dios». En este día, y ante la imagen de la patrona de la ciudad portuaria, la Virgen de la Caridad, el obispo invitó a los presentes, y especialmente al candidato al sacerdocio, a ponerse bajo el manto de la Madre de Dios: «Que la santísima Virgen de la Caridad, con manos inocentes y corazón puro, nos mire con misericordia y nos conceda un corazón grande para seguir siendo constructores de la paz». Tras la homilía tuvo lugar el rito de la ordenación, por el que José Miguel recibió el Orden Sacerdotal, incorporándose así al presbiterio diocesano. El neopresbítero, en su acción de gracias, reconoció haber aprendido durante su etapa de formación en el Seminario Mayor San Fulgencio que «no se puede separar la vocación a la santidad y la vocación sacerdotal». Por ello hizo una súplica a todos los presentes para que orasen «por la santidad de los sacerdotes». También dirigió sus palabras a la patrona: «Virgencica mía de la Caridad, acepta el obsequio de mi servidumbre y, por tus purísimas manos, preséntalo a tu Hijo Jesucristo a fin de que mi vida sea una ofrenda agradable a la Santísima Trinidad». El recién ordenado sacerdote recibió por parte de la Junta de Gobierno del Santo y Real Hospital de Caridad, como obsequio y recuerdo de este día, una imagen de la Virgen de la Caridad. «Ha sido un regalo muy grande poder celebrar aquí este sacramento» agradeció Mons. Lorca Planes. Antes de finalizar la celebración con la salve cartagenera a la patrona, el obispo de Cartagena hizo público el destino donde José Miguel iniciará su ministerio sacerdotal, que servirá como vicario parroquial en la Parroquia La Purísima de Yecla. Mañana martes, 16 de julio, en el día de la Virgen del Carmen, José Miguel celebrará la Misa de las 19:30 horas en su parroquia de origen, María Reina de los Corazones en el Polígono de Santa Ana (Cartagena). Homilía del obispo de Cartagena Galería de imágenes
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