Feliz Pascua de Resurrección

Escrito del Obispo de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, para el Domingo de Resurrección.

Feliz Pascua de Resurrección

Que la experiencia de ser testigos de la Resurrección les lleve a todos a cantar aleluya, a bendecir a Dios por el enorme regalo de la VIDA que nos ha hecho, porque ha vencido a la muerte y al pecado. ¡Su victoria es nuestra victoria! Recordemos siempre que la fe en la resurrección es un artículo del Credo, vivido desde el comienzo y que se trata de una convicción basada en un hecho, en un acontecimiento real, y no en un mito o en una idea inventada por los Apóstoles o producida por la comunidad postpascual reunida en torno a los Apóstoles en Jerusalén, para superar junto con ellos el sentido de desilusión consiguiente a la muerte de Cristo en la cruz. La fe cristiana en la resurrección de Cristo está ligada, pues, a un hecho, que tiene una dimensión histórica precisa.

Conocemos cómo hace las cosas Dios y cómo sale a nuestro encuentro con medios frágiles, con apariencias de debilidad, pero es esa vía la que ha elegido para dialogar con nosotros, porque su trayectoria ha sido así, con una vida sencilla, oculta, una familia pobre y Él mismo se reconoce como el Varón de dolores de Isaías. Su ejemplo va por delante. Pero Dios sabe hacer las cosas bien y llega a lo hondo de nuestro ser. La comunicación de los mismos acontecimientos de la Resurrección del Señor, lo más grande de la historia, lo ha confiado a las mujeres, aunque parezca extraño a una cultura donde el testimonio de una mujer era débil, sin embargo Dios se valió de ellas para dar a conocer la noticia más grande; las mujeres fueron las primeras mensajeras de la resurrección de Cristo, y lo fueron para los mismos Apóstoles (Lc 24, 10). ¡Hecho elocuente sobre la importancia de la mujer ya en los días del acontecimiento pascual! No puede dejar de impresionar la consideración del estado de ánimo de las tres mujeres, que dirigiéndose al sepulcro al alba se decían entre sí: ‘¿Quién nos retirará la piedra de la puerta del sepulcro?’ (Mc 16, 3). Cuando llegaron donde lo enterraron, con gran maravilla constataron, que ‘la piedra estaba corrida aunque era muy grande’ (Mc 16, 4).

Para las mujeres, para los Apóstoles y para todos, el camino está abierto y te lleva al encuentro con el Resucitado: entonces la percepción aún tímida e incierta se convierte en convicción y, más aun, en fe en Aquel que ‘ha resucitado verdaderamente’. ¡El contacto directo con Cristo desencadena la chispa que hace saltar la fe! Feliz día de la Resurrección del Señor a todos. Pero, ¡atención!, que no se nos olvide la lección que hemos aprendido de Jesús.

+ José Manuel Lorca Planes

Obispo de Cartagena

Contenido relacionado

Cristo es la Buena Noticia

IV domingo del Tiempo Ordinario El Tiempo Ordinario es un periodo del...

Enlaces de interés