Después de iniciar el mes de septiembre junto a los murcianos, la Virgen de la Fuensanta, patrona de Murcia y de su huerta, regresó ayer a su santuario, en Algezares, acompañada por una multitud de romeros.
Lo hizo después de la Eucaristía de las 7:00 horas, en la Catedral de Murcia. La celebración estuvo presidida por el obispo de Cartagena, Mons. José Manuel Lorca Planes, y en ella participaron un gran número de fieles y romeros, que siguieron la celebración desde las distintas naves del templo catedralicio. Estuvieron presentes, además, numerosos sacerdotes, entre ellos el arzobispo emérito de Burgos, Mons. Francisco Gil; seminaristas, religiosas y autoridades civiles.
«El primer motivo grande para imitar a María es que nos ha enseñado a estar muy cerca de Dios con fidelidad, sabiendo agradarle a él en todo, con nuestras palabras, obras y responsabilidades», recordó el obispo durante la homilía. Otro motivo para imitar a la Virgen, destacó el prelado, es cómo María lo dejó todo para ayudar a su prima, santa Isabel: «Una de las cosas que nos pide el Señor es tender la mano para ayudar a otros, especialmente a los más necesitados, y eso lo hemos aprendido de María, de cómo ella salió presurosa en ayuda de Isabel, con disponibilidad total».
Mons. Lorca animó a los presentes a «seguir mirando el rostro de María y del Señor no solo en los días de fiesta, sino también en el día a día, en los trabajos y responsabilidades, para responder con ilusión y esperanza al proyecto que Dios ha pensado para cada uno».
El obispo cerró la homilía dirigiéndose a la Virgen: «Madre, no nos dejes; este día celebramos esta experiencia que vivimos todos los años; esta representación de que te despedimos sabiendo que estás con nosotros, de ir todos detrás de ti, sabiendo que tú vas siempre por delante. Te pido por esta ciudad, por esta Región, por los pueblos que la componen, por todos y cada uno de nosotros. Atiende a los que tú sabes que más lo necesitan; a las familias que tienen dificultades, a los jóvenes, a todos aquellos que buscan caminos de esperanza, y ayúdanos a todos a saber ayudar».
Al término de la celebración, la imagen de la Virgen de la Fuensanta emprendió su regreso al santuario. Este año, los romeros esperaron la salida de la patrona en la plaza de la Cruz, por encontrarse el imafronte de la Catedral en proceso de restauración. Desde allí acompañaron a la Morenica hasta su santuario, entre aplausos y vivas. Terminadas las fiestas patronales, la Virgen de la Fuensanta permanecerá en Algezares hasta el próximo mes de febrero, cuando regresará a Murcia con motivo del aniversario de su coronación canónica.
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