En la tarde del 28 de noviembre el obispo diocesano, Mons. Rafael Zornoza, presidió la misa de clausura del 175 aniversario de la consagración de la Catedral Nueva de Cádiz.
Concelebrada junto al Cabildo Catedral, Mons. Zornoza destacó el «enorme esfuerzo y sacrificio para construir un edificio de estas características para el culto a Dios». Además, el obispo diocesano aseguró que la seo gaditana forma parte del paisaje de Cádiz, y sin ella no se entendería la ciudad. «Es la madre de todas las iglesias de la diócesis. Gracias a ella en este pueblo sobresale la alabanza de Cristo y su Palabra».
De otro lado, el prelado afirmó que el primer templo de la diócesis es «una referencia dedicada a la Cruz de Cristo, que es la fuente de la salvación».
El obispo de Cádiz y Ceuta hizo un paralelismo con el concepto de «creación». «Detrás de la construcción de un templo de tal magnitud está la obra de la creación de Dios. El hombre que viene de la creación de Dios es capaz de crear algo así porque Dios le ha dado la capacidad de crear. Se muestra al mundo que con Cristo puede nacer una nueva creación».
Por último, Mons. Zornoza explicó el verdadero significado de la Catedral. «Hoy nuestra Catedral, aunque es muy visitada por los turistas, no es una pieza de museo, es un lugar vivo que nos lleva a Dios».
La Catedral Nueva de Cádiz fue consagrada el 28 de noviembre de 1838 por el obispo Mons. Domingo de Silos Moreno en sustitución de la de Santa Cruz.
