El sacerdote gaditano asume su nuevo cargo con «responsabilidad y agradecimiento» y espera realizarlo «con entrega» para con los miembros del Cabildo y el pueblo diocesano.
El nuevo deán ha destacado la importancia del primer templo gaditano como centro litúrgico de la iglesia diocesana: «la liturgia no es sólo un conjunto de ritos o celebraciones sino que representa el encuentro único y especial entre Dios y el hombre y una de las misiones de la Catedral es favorecer ese encuentro».
Ricardo Jiménez ha recordado que «la misión esencial del cabildo es atender la Catedral: que dé el servicio necesario para el pueblo fiel. En primer lugar, cuidando la liturgia, que la Catedral sea la escuela de la liturgia, la pastoral y la conservación del patrimonio». En esta última línea ha querido subrayar que continuará con la gran labor que sus antecesores han realizado en el impulso a la S.A.I. Catedral de Cádiz. «Que se sepa que está abierta al público o que todos los domingos se celebra la Misa».
Las obras que hicieron que la Catedral estuviera cerrada mucho tiempo ha hecho, en opinión del nuevo deán, que muchos gaditanos vean la Catedral como «parte de la estampa de Cádiz pero no la sientan suya. Lo que queremos es que el gaditano entre, que se sienta como en su casa, que sienta que la Catedral forma parte de su propia vida de fe».
Asimismo, ha incidido en la importante tarea de conservación del patrimonio, que se realiza a través de la sede gaditana y que tiene que seguir siendo una de las tareas claves del Cabildo.
El actual rector del Seminario Conciliar San Bartolomé sucede en el cargo al P. Guillermo Domínguez Leonsegui, que ha estado al frente durante un quinquenio.