El obispo Mons. Rafael Zornoza preside la bendición del nuevo altar en un emotivo acto en Hadú, acompañado por autoridades civiles, militares, el clero de Ceuta y los seminaristas de Cádiz.
La parroquia de San José, ubicada en el emblemático barrio de Hadú, ha vuelto a abrir sus puertas este Sábado de Pasión, después de permanecer cerrada durante más de cuatro años. La esperada reapertura tuvo lugar en un acto solemne presidido por el obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, Don Rafael Zornoza Boy, quien se encargó de bendecir el nuevo altar ante la presencia de fieles, autoridades locales y representantes del clero.
Durante la ceremonia, el obispo expresó su profundo agradecimiento al Gobierno de Ceuta, y en particular al presidente Juan Vivas, por su compromiso y apoyo para que este templo pudiera volver a acoger celebraciones religiosas. “Salvar este edificio es también recuperar una parte esencial de nuestro patrimonio espiritual”, señaló Zornoza, destacando el esfuerzo conjunto entre la Iglesia y las instituciones públicas.
El templo, ahora dotado con una moderna iluminación LED que realza su arquitectura y crea un ambiente acogedor, se llenó de feligreses que no quisieron perderse este momento histórico. Incluso la lluvia, presente durante parte del día, no impidió que la jornada se viviera con entusiasmo y emoción.
Una restauración con mucho significado
Previo a la misa, el vicario de Ceuta, Francisco José Fernández Alcedo, dirigió unas palabras en las que subrayó la dimensión simbólica de este proyecto. “A veces, lo que parece una dificultad se convierte en una oportunidad de gracia. Hoy inauguramos la restauración de esta parroquia, consagrada por primera vez en 2002”, recordó.
Fernández Alcedo reconoció que las obras han requerido varios años de trabajo y superación de dificultades, pero aseguró que el resultado ha merecido la pena, aunque aún quedan labores por finalizar. “Todavía hay trabajo pendiente, pero confiamos en que con los recursos adecuados se podrá completar la restauración en su totalidad”, añadió.
En este sentido, el vicario dio las “gracias de corazón” a todas las personas que han colaborado en la obra. “La Diócesis de Cádiz y Ceuta está realizando un importante esfuerzo con la inestimable ayuda de la Ciudad y de las instituciones para restaurar y conservar el patrimonio eclesial”.
Representación institucional y hermandades
El acto contó con la presencia de numerosas personalidades, entre ellas la delegada del Gobierno en Ceuta, Cristina Pérez; el comandante general, Luis Jesús Fernández Herrero; el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, Jesús Bollit; así como representantes de distintas hermandades locales. La Hermandad de la Encrucijada, con su Hermano Mayor Pedro Mariscal a la cabeza, estuvo presente con todos los miembros de su Junta.
Tras la Eucaristía, se descubrió una placa conmemorativa a la entrada del templo, como testimonio del esfuerzo realizado y del día en que la parroquia de San José volvió a abrir sus puertas al barrio de Hadú y a toda la ciudad.