Carta pastoral del Obispo de Cádiz, D. Antonio Ceballos Atienza, con motivo de la XXX Semana de la Familia. Mis queridos diocesanos:
Estamos viviendo en nuestra querida y amada Diócesis de Cádiz y Ceuta unos años de gracia cuyo objetivo prioritario pastoral sigue siendo la familia. Este año acabo de presentar en toda la Diócesis la Carta Pastoral, titulada: “Llamados a promover e impulsar el crecimiento de la Pastoral Familiar”, en un momento en el que la difícil situación económica y el paro de las familias llega hasta nosotros.
1. La Familia: asignatura para la vida
Permitidme que un año más os invite a participar activamente en la XXX Semana de la Familia, que tendrá lugar durante los días 16 al 23 de noviembre del 2008, cuyo lema es el siguiente: “La Familia: asignatura para la vida”. Este lema nos recuerda que todos tenemos la responsabilidad de promover la vida, cada uno en la medida de sus posibilidades, sobre todo la familia, para evitar la extensión en nuestra sociedad de la cultura de la muerte y de leyes anti-vida.
2. Cultura de la familia
La importancia de la familia y las fuertes presiones a que se halla sometida están pidiendo un esfuerzo singular para promover, entre todos, una cultura de la familia. Es preciso recuperar y difundir un ambiente cultural favorable a la familia y a la vida, sobre la que caen ahora demasiadas sospechas, demasiadas críticas, demasiados menosprecios y difamaciones. La Iglesia, los cristianos, tenemos que prestar el servicio de anunciar y mostrar con los hechos el valor humano de una familia estable, fecunda, responsabilizada y activa en la vida social, y en la asignatura de la vida.
3. Asignatura de la vida
La asignatura de la vida nos está exigiendo tomar un decidida acción a favor de la vida. El Papa Juan Pablo II, de feliz memoria, en la Evangelium vitae nos decía que tenemos que denunciar la extensión en nuestra sociedad de una verdadera cultura de la muerte (cf. EV 87), una visión del hombre que deja sin fundamentos sus derechos fundamentales y diluye en la conciencia social el valor de la vida y la dignidad de la persona.
La primera acción de promoción de una cultura de la vida es la atención a las situaciones donde la vida de una persona esté en peligro. La protección de la vida constituye algo más que un derecho esencial e inviolable del hombre. La vida genera Derechos, es manantial del que el Derecho mismo nace. Una sociedad que no respeta la vida es una sociedad sin Derecho.
4. Una cultura de la vida
Una cultura de la vida, si es verdadera y no queda reducida a nuevo eslogan ideológico, exige la necesidad de conversión para generar la cultura de la vida. Todos contribuimos a la cultura de la muerte cuando nos sometemos a la mentalidad consumista, cuando hacemos del poder, del dinero y del éxito social los criterios que rigen el valor de la vida humana. La conversión, pues, es siempre la primera responsabilidad de las católicos en relación con la vida. La primera y la única indispensable, verdaderamente insustituible, si de verdad se ama la vida.
Considero que es necesario la presencia de personas públicas que se comprometan por la causa de la vida. Instituciones académicas, universitarias y culturales que promuevan en nuestra sociedad el valor de la vida. Dios quiera que esta Semana de la Familia nos ayude a renovar nuestro compromiso por la vida y a convertirnos a la vida.
5. Exhortación e invitación
Os exhorto, queridos diocesanos, a que sigáis trabajando en esta asignatura importantísima de la vida en familia. Os invito a vosotros jóvenes y a los sacerdotes, mis fieles colaboradores, a los religiosos, religiosas, personas consagradas, vírgenes consagradas, diáconos, seminaristas, laicos y miembros de movimientos familiares a participar activamente en esta XXX Semana de la Familia, y a pedir al Señor por los esfuerzos que, en nuestra Diócesis, estamos llevando a cabo sobre la familia.
Que la Sagrada Familia de Nazaret, Jesús, María y José, nos acompañe ahora y siempre.
Reza por vosotros, os quiere y bendice,
+ Antonio Ceballos Atienza
Obispo de Cádiz y Ceuta
Cádiz, 28 de octubre de 2008
