Carta Pastoral del Obispo de Cádiz y Ceuta, D. Antonio Ceballos Atienza. Mis queridos diocesanos:
La Iglesia universal celebra el Día del Papa, como sucesor de Pedro, en la Cátedra de Roma y su supremo ministerio apostólico, el día 29 de junio, solemnidad de los apóstoles Pedro y Pablo.
1. Significado de esta Jornada
El significado de esta Jornada Papal es, entre otros, el de reconocer los vínculos de comunión en la fe y en la caridad, mediante la adhesión a la persona de Aquel que es, en virtud de su cargo de Vicario de Cristo, sucesor de Pedro, Pastor universal, principio y fundamento visible de la unidad de la Iglesia (cf. LG 22-23).
Considero, también, que ningún momento como este es tan apropiado a fin de que todos los diocesanos renovemos un homenaje de fe y de amor: “Si alguno está unido a la Cátedra de Pedro, decía San Jerónimo, ése es mío, estoy con él”. Este debe ser también hoy nuestro lenguaje y nuestra actitud. Estar unidos al Papa es estarlo a Cristo; pues no hay Iglesia sin Cristo, ni Cristo sin Iglesia y su cabeza visible que es el Papa.
2. Estar con el Papa Benedicto XVI
Estar unidos al Papa, queridos diocesanos, es dar la medida de adhesión a la verdadera y auténtica doctrina católica, válida para toda la Iglesia. Estar con el Papa es, además, situarnos con precisión en el centro de la problemática actual; porque él, como Pastor universal, vigilante y buen samaritano, está siempre muy cerca de los acontecimientos de la Iglesia y de los hombres, para orientarnos y confirmarnos, según las palabras de Jesús a Pedro: “confirma a tus hermanos”, “apacienta mis ovejas”; mientras Él, como decía el Papa Pablo VI de si mismo, “Antes de ser maestro, es discípulo, alumno más que ningún otro de la trascendente y bendita Palabra de Dios”.
3. Iglesia particular
La Iglesia del Señor es una comunión, no una federación. En cada Iglesia, la señal y garantía visible de su unidad y comunión es el Obispo que la preside como representante de Nuestro Señor Jesucristo. Pero si las Iglesias no son una federación de comunidades que han llegado a un acuerdo, sino una comunión que brota de su único Señor y de su Espíritu, entonces una persona, el Papa, ha de representar y tutelar al “colegio” de los obispos presidido por su cabeza, el Papa, sucesor de Pedro, el primero en el “colegio” de los Apóstoles. Los obispos y sus respectivas Iglesias están en comunión entre sí, si lo están con el Papa.
4. El Día del Papa los católicos han de orar por él y ayudarle en su ministerio
Hay unas palabras de Jesús que desvelan todo el peso, insoportable y glorioso, del servicio de Pedro y de sus sucesores: “¡Simón, Simón! Mira que Satanás ha solicitado el poder cribaros como trigo; pero yo he rogado por ti, para que tu fe no desfallezca. Y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos” (Lc 22,31-32). Hoy el Papa está sufriendo mucho porque está siendo muy atacado. Particularmente los medios de comunicación no desperdician ocasión para expresar sus más injuriosos ataques a su persona, pensamiento y gobierno. Se ha convertido el Papa en bandera en torno a la cual se libra un combate decisivo (cf. Lc 2,34). En nuestros tiempos no está en juego éste o el otro punto de la doctrina y moral cristiana o de la disciplina eclesiástica, sino el cristianismo mismo en su originalidad.
Nunca una persona ha cargado con tensiones de proporciones tan vastas como la redondez de la tierra. Jesús ante toda la Iglesia ruega por él al Padre. Nosotros debemos dejarnos confirmar por él para permanecer en la comunión de fe y de salvación. Estar con el Papa es estar con Cristo.
5. Óbolo de San Pedro
Finalmente, quisiera recordar un aspecto que aunque el Papa Benedicto no lo menciona de ordinario, si lo están haciendo las distintas oficinas y dicasterios de Roma: me refiero a la ayuda económica de las Iglesias de todo el mundo a la Santa Sede a través del llamado óbolo de San Pedro, es decir, la colecta que suele hacerse precisamente en este día de San Pedro.
Fiel a una tradición secular, y consciente de las muchas necesidades a las que el Papa Benedicto XVI ha de hacer frente desde el ministerio de la unidad eclesial, yo os pido a todos los fieles de la Iglesia de Cádiz y Ceuta que en este día de San Pedro y San Pablo elevéis vuestras fervientes oraciones por nuestro queridísimo Papa Benedicto XVI, sucesor de San Pedro, y le ofrezcáis el obsequio de vuestra limosna, que será, estoy seguro, de acuerdo a vuestras posibilidades y llena de amor, tal y como se desprende de nuestro amor filial. Como el mismo Santo Padre nos ha recordado recientemente, “esta ayuda es indispensable para que la Curia Romana pueda servir mejor y cumplir más fácilmente su misión y diaconía a toda la Iglesia”.
Adhesión cordial, estar con el Papa, oración ferviente y ayuda económica: he aquí lo polos en los que debe moverse todo el contenido espiritual de este gran Día del Papa, en la fiesta de San Pedro y San Pablo.
Reza por vosotros, os quiere y bendice,
+ Antonio Ceballos Atienza
Obispo de Cádiz y Ceuta
Cádiz, 18 de junio de 2009