El sábado 1 de abril, el colegio de los Salesianos de Cádiz abrió sus puertas para acoger a cientos de jóvenes provenientes de las diferentes localidades de la Diócesis de Cádiz y Ceuta para celebrar el Encuentro Diocesano de Juventud 2017 #EDJ17. Jóvenes de Cádiz, San Fernando, Puerto Real, Chiclana, Conil, Paterna, Barbate, Benalup, Algeciras y Ceuta fueron pasando por el área de acogida para recoger su inscripción y el programa del acto.
El Encuentro, presido por nuestro obispo diocesano, Mons. Rafael Zornoza, y acompañado por un nutrido número de sacerdotes y seminaristas, se inició con una dinámica de presentación dirigida por miembros del Movimiento Scouts Católicos Chaminade, inaugurando el ambiente alegre y festivo que se experimentó en todo momento.
Tras una oración dirigida por Mons. Zornoza llegó uno de los momentos más esperados: el testimonio de Juan Manuel Cotelo, conocido por la producción de películas católicas como: La Última Cima, Tierra de María o Footprints, y que pronto captó la atención de todos con sus cualidades de gran comunicador. Imposible resumir en pocas líneas la riqueza de su exposición que fue desarrollando a partir de su propia experiencia. Con la imagen de un sueño relató cómo conoció la llamada de Jesucristo a seguirle, como sigue llamando a cada uno. Animó a los jóvenes a ser valientes y atreverse a escuchar la llamada de Dios, a no tener miedo a dejar entrar a Jesucristo en su vida con la tranquilidad de saber que, por difícil que parezca, es Él con su gracia el que lo hará posible. Hizo varios llamamientos muy directos: “Cristo necesita apóstoles, ¿algún voluntario?; Cristo necesita sacerdotes, ¿algún voluntario?”. “La potencia de Jesucristo no es ya una teoría en la que creo, sino una Persona que me entusiasma, que se ocupa de mí, que se encarga de lo mío, que me resucita, que me da fuerzas”. No se trata de valores son de una persona, Jesucristo, que cuando dejamos que viva en nosotros transforma nuestra vida de la manera que la llena de sentido. Terminó hablando de su último proyecto, una película sobre el perdón donde podremos ver casos reales de reconciliación espectaculares a pesar de que parecieran imposibles.
Después de un pequeño descanso pudieron disfrutar de un original juego de Kahooot para pasar a continuación al patio para la hora del almuerzo. Y llegó el momento de la rifa de la cesta para la que se había repartido una serie de papeletas.
A continuación se presentaron los próximos proyectos diocesanos: la peregrinación al Santuario de Fátima del 12 al 14 de mayo, coincidiendo con el centenario de las apariciones y con la presencia del Papa Francisco; y la peregrinación a Roma del 23 del julio al 1 de agosto, impresionante viaje lleno de sorpresas.
La tarde estuvo animada por una obra de teatro sobre la “historia de la salvación” protagonizada por los mismos jóvenes que emocionó a los asistentes y arrancó una caluroso aplauso de agradecimiento. Terminó así la tarde con una oración ante la Cruz de los Jóvenes donde cada uno tuvo la oportunidad de hablar con el Señor desde la intimidad del silencio donde Cristo habla claro al corazón de cada uno.
Un encuentro joven tan festivo sólo podía finalizar celebrándolo con la Eucaristía en la Parroquia de Santo Tomás a la que llegaron los jóvenes en peregrinación llevando consigo la réplica de la Cruz que San Juan Pablo II les ofreciera para las JMJ. La misa fue una auténtica celebración de acción de gracias donde varios sacerdotes estuvieron disponibles para los que quisieron confesarse. D. Rafael exhortó a los jóvenes a conocer, seguir y amar a Jesucristo y les envío para que hablaran de Él a sus compañeros de estudio o de trabajo, … a ponerlo en el centro de su vida y llevarlo a los demás.
Finalizó con un canto a la Virgen María agradeciéndole su protección maternal en todo el encuentro.