Mons. Rafael Zornoza se reunió con los fieles de las distintas parroquias de Ceuta para hacer una exposición de la situación de la Diócesis de Cádiz y Ceuta en el momento actual, así como un recordatorio de lo vivido el curso pasado.
El prelado aprovechó la ocasión para informar del inició de la primera edición de la Escuela de Evangelizadores en la ciudad autónoma, debido al número de personas que querían asistir, pero que por las dificultades que ocasiona el tener que cruzar el estrecho para las sesiones y retiros no podían hacerlo hasta ahora. Una iniciativa que surge, según Mons. Zornoza, por el reto de nuestra Iglesia a misionar para transmitir la fe que vivimos a los alejados, saliendo al encuentro de los necesitados.
Para ello, insistió el obispo de Cádiz y Ceuta, es necesario «una colaboración estrecha entre todas las parroquias de Ceuta con sus diferentes grupos y movimientos parroquiales, una comunión entre todos, cada uno con su carisma: cursillistas; Cáritas; catequesis; adoradores etc., aunque después, cada cual vuelva a lo suyo». También afirmó que «la fe y la caridad van siempre juntas, y quien está sosteniendo la caridad en la Iglesia es la fe».
Para llevar a cabo todo esto la propuesta presentada es la siguiente:
1) Una nueva evangelización
2) Caridad con los marginados; revitalizar Cáritas, (Informe FOESSA) e inmigrantes
3) La Liturgia debe ser misionera, así como la catequesis; renovada, alegre, atrayente.
Concluyendo que este impulso misionero tiene que llegar a todos, y juntos ofrecer a Cristo a los demás.
Una vez concluida la exposición, el obispo dio paso al P. Fernando Campos, vicario general de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, para que explicara en que iba a consistir la nueva evangelización.
Durante su estancia, Mons. Zornoza hizo una visita a la cárcel, a los Hermanos de la Cruz Blanca, a las Religiosas Adoratrices y a las Religiosas del Colegio de la Inmaculada.
