El pasado Viernes de Dolores, el grupo del Movimiento de Vida Ascendente de la Parroquia de San José de Cádiz se unió a la comunidad parroquial en el emotivo rezo del Vía Matris, una devoción especial en honor a la Virgen bajo la advocación de María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso. Esta ceremonia tuvo lugar en el marco del triduo celebrado en su honor, y contó con la participación activa de los miembros del grupo, quienes, con gran fervor y devoción, vivieron un momento de profundo recogimiento.
La liturgia fue oficiada por el párroco de la parroquia, el padre Alfonso Gutiérrez, quien estuvo acompañado en el altar por el diácono permanente Manuel López. A lo largo de la ceremonia, se leyó una reflexión por cada uno de los siete dolores de la Virgen María, siendo cada uno de estos relatos leído por una de las componentes del grupo del Movimiento de Vida Ascendente.
El Vía Matris, que conmemora los sufrimientos de la Virgen María durante la Pasión de su Hijo, resultó ser un acto de recogimiento y devoción, en el que los participantes pudieron meditar sobre el dolor de la Madre ante el sacrificio de su hijo.
El rezo culminó con la celebración de la Eucaristía, un momento de unión fraternal y espiritual para todos los asistentes, quienes vivieron la ceremonia con gran emoción y satisfacción.
Además de su participación en el Vía Matris, el grupo de Vida Ascendente mantiene una tradición mensual que refuerza su vínculo con la Virgen. Cada día 13 de cada mes, celebran el rezo del Santo Rosario a la Virgen de Fátima, abierto a la participación de todos los feligreses de la parroquia.