COMUNICADO A LA DIÓCESIS POR LA ACEPTACIÓN DE MI RENUNCIA Y EL NOMBRAMIENTO DEL ADMINISTRADOR APOSTÓLICO
La Santa Sede ha hecho pública la aceptación por parte del Santo Padre de mi renuncia al oficio de Obispo de Cádiz y Ceuta, presentada el pasado mes de julio de 2024, conforme al canon 401 del Código de Derecho Canónico, y reiterada por mi en dos ocasiones.
Deseo expresar mi sincero agradecimiento al Papa León XIV por su comprensión y cercanía paternal, al haberme concedido el poder dedicarme plenamente a los tratamientos médicos que requiere mi actual estado de salud, así como a atender con serenidad y confianza en Dios mi defensa ante una acusación injusta y falsa, que está siendo estudiada por la Iglesia.
Agradezco igualmente al Santo Padre el nombramiento de un Administrador para esta diócesis, signo de su solicitud por el bien espiritual y pastoral del Pueblo de Dios que peregrina en Cádiz y Ceuta. Mons. D. Ramón Valdivia Giménez, obispo auxiliar de Sevilla, es un valioso obispo, jurista, filósofo y teólogo, y un apreciado amigo con quien enseguida os sentiréis acogidos, y que alentará los esfuerzos pastorales. Próximamente anunciaremos la celebración de una misa de bienvenida a la diócesis. Le aseguro mi oración y mi obediencia filial, así como mi plena disposición a colaborar, desde la comunión eclesial, en todo lo que contribuya a la unidad en este momento de transición en el gobierno de nuestra Iglesia diocesana.
Os invito a acoger con fe al Administrador que el Santo Padre ha designado para el bien de la diócesis, y a mantener la comunión y la esperanza en este tiempo de transición. El Señor no abandona nunca a su Iglesia.
Estos años han sido para mi un tiempo de entrega y de gracia, en los que he compartido con vosotros la alegría y la esperanza de servir a Cristo en esta tierra bendita. Agradezco de corazón a los sacerdotes, consagrados y laicos su colaboración, su oración y su cariño durante este tiempo de ministerio.
Pido al Señor que bendiga abundantemente a esta querida diócesis, y a todos cuantos en ella trabajan con fidelidad y amor al servicio del Evangelio, y también que me acompañéis con vuestra oración, como yo lo haré por vosotros cada día, confiando en la intercesión maternal de la Bienaventurada Virgen María y de los santo Servando y Germán, y San Daniel y compañeros mártires, patronos de nuestra diócesis.

