Aunque han descendido las personas atendidas, la gravedad de sus problemáticas aumentan, dificultando su recuperación social y laboral
Cáritas Diocesana de Cádiz presenta su Memoria de actividades 2024 en la que da a conocer su acción social durante el pasado año. La presentación de la memoria anual se enmarca en la celebración del Día de Caridad – Corpus Christi, bajo el lema “Mientras haya personas, hay esperanza”.
La memoria recoge la acción de Cáritas en todo el territorio diocesano. 5.889 personas han sido atendidas directamente por Cáritas y más de 15.000 han sido beneficiaras de las ayudas ofrecidas. Esta labor ha sido posible gracias al compromiso activo de 602 voluntarios que prestan sus servicios solidarios en 83 equipos de voluntariado en parroquias. Junto al voluntariado, 38 personas contratadas realizan su labor en proyectos de carácter diocesano desarrollados en 7 centros de atención social ubicados en distintas localidades de la Diócesis.
El total de los recursos invertidos por Cáritas en 2024 ascendió a 2.266.927,33 euros, una cifra que refleja el esfuerzo constante por mantener y fortalecer los programas sociales de la entidad.
Contexto social: entre la precariedad laboral y la crisis habitacional
En nuestra sociedad, el empleo es el eje que sostiene la vida de la mayoría de los hogares, siendo su principal, y muchas veces única, fuente de ingresos. Tras la crisis de la COVID-19, los indicadores muestran una ligera mejoría: más personas ocupadas y una reducción en las tasas de desempleo. Sin embargo, esta recuperación oculta una realidad dual y preocupante. Por un lado, se crean empleos cualificados con potencial integrador; por otro, abundan los empleos precarios e inestables que no garantizan una vida digna. En Cádiz, esta precariedad laboral se traduce en hogares que, aun trabajando, no consiguen superar la pobreza, fenómeno que afecta al 12% de la población española, y que aquí tiene una incidencia palpable.
A esto se suma un problema creciente: el acceso a una vivienda digna se ha convertido en una realidad casi inalcanzable. La oferta de alquiler a largo plazo es escasa, los requisitos para acceder son cada vez más estrictos y los precios continúan al alza, obligando a muchas familias a destinar una parte excesiva de sus ingresos a mantener un techo. Esta situación agrava la exclusión social y limita gravemente la estabilidad de los hogares más vulnerables.
La realidad nos muestra que la erradicación de la pobreza no pasa solo por aumentar los ingresos, sino también por intervenir en los costes básicos, especialmente en la vivienda. Sin políticas que regulen y moderen el mercado, las personas más frágiles quedarán atrapadas en un círculo del que es imposible salir.
Durante décadas, nuestra Diócesis ha vivido el impacto de crisis económicas y sociales que han ido dejando atrás a muchas familias, consolidando una pobreza estructural que no desaparece con los breves períodos de crecimiento económico. Esto nos interpela como sociedad y exige que coloquemos en el centro de la agenda política y social a quienes sufren estas situaciones, con acciones contundentes basadas en reducir la desigualdad, fortalecer la cohesión social y promover el bien común.
Acogida y atención a las familias
Esta área constituye el eje central de la acción de Cáritas. En 2024 se acompañó a 5.160 familias, ofreciéndoles apoyo en necesidades básicas (alimentación, vivienda, suministros), orientación y acompañamiento integral. Esta línea de acción concentró el mayor esfuerzo económico, sosteniendo hogares donde la pobreza es estructural y la precariedad cotidiana. Su impacto ha repercutido en 14.448 personas.
En esta área se encuadran proyectos que atienden la realidad de la pobreza en todas las etapas de la vida: madres gestantes (Proyecto Belén), infancia y adolescencia, familias (Proyecto Nazaret) y acompañamiento al mayor en soledad no deseada (Proyecto Estamos Contigo).
El total de recursos invertidos en este capítulo asciende a 547.590.54 euros.
Personas sin hogar
Cáritas atendió en 2024 a 716 personas sin hogar a través de sus dispositivos en Algeciras, San Fernando y Chiclana de la Frontera. Se ofrecieron recursos básicos (alimentación, higiene, descanso), atención social y talleres socio educativos (32 talleres) de desarrollo personal e integración. La inversión realizada en este programa fue un total 283.396.50 euros.
Empleo y economía social
Cáritas acompañó a 537 personas en su búsqueda de empleo, logrando 200 inserciones laborales. La inversión en este capítulo fue de 720.882.23 euros gracias a los cuales se pudieron desarrollar itinerarios de inserción sociolaboral, labor de intermediación a través de nuestra Agencia de Colocación y sostener la empresa de inserción INSERTA CÁDIZ. Es importante resaltar que el número de empresas colaboradoras ha aumentado en el 2024, superando el centenar.
INSERTA CÁDIZ, empresas de inserción dedicada al reciclaje textil recogió 587.497 kilos de ropa a través de sus 107 puntos de recogida. 9 personas tuvieron empleo de inserción en esta actividad y 2 lograron acceder al mercado laboral normalizado.
Formación e inclusión
La Escuela de Formación está encargada de la formación del voluntariado, del personal técnico y de las personas participantes que reciben ayuda en Cáritas. Se formaron en 33 acciones formativas, 111 voluntarios, en 28 acciones formativas 38 profesiones y en 57 acciones formativas 186 alumnos, de los cuales 69 alcanzaron su inserción laboral. El total de los recursos invertidos en formación asciende a 442.243.05 euros.
Calidad, sensibilización y austeridad
En 2024, Cáritas renovó su certificación de calidad UNE EN ISO 9001:2015, que se mantendrá vigente hasta 2027. Este hecho reafirma su compromiso con la mejora continua y con la implicación activa de las personas y entidades que forman parte de su labor. A pesar de los elevados recursos económicos invertidos, Cáritas Diocesana de Cádiz ha logrado conservar un alto nivel de austeridad en el área de Gestión y Administración. Así, por cada 100 euros destinados a la lucha contra la pobreza, únicamente 7,3 euros se han invertido en gastos de gestión.
Agradecimientos y llamada a la solidaridad
Cáritas agradece especialmente a las personas voluntarias su entrega y dedicación, y a los socios y donantes, empresas colaboradoras y administraciones públicas por el apoyo económico a la acción social de Cáritas.
Se invita a la ciudadanía a seguir colaborando con Cáritas, porque la pobreza no se ha ido, solo ha cambiado de rostro, por eso se hace un llamamiento a la colaboración económica para que la labor de Cáritas no se vea en riesgo.
Si se quiere colaborar con Cáritas se pueden donar en la cuenta ES98 2103 4000 67 3300000639 o a través de la www.caritas.es/cadiz, en el teléfono 956 212 080 o a través de un testamento solidario.